En mayo, las estatales Codelco y Enami eligieron a la transnacional Rio Tinto como su gran aliada para extraer litio en salares y humedales altoandinos.
El «Proyecto Paloma» en el Salar de Maricunga y «Salares Altoandinos» en ecosistemas frágiles como Aguilar, La Isla y Grande son los nuevos focos de explotación.
Mientras la clase política aplaude la alianza, el historial de impactos ambientales, conflictos con comunidades y denuncias internacionales de Rio Tinto es ignorado.
Desde Chile hasta Argentina, pasando por Colombia y más allá, Rio Tinto ha sido denunciada por dañar ecosistemas, afectar pueblos indígenas y operar con impunidad. En otros continentes también tiene un grave historial.
Lee nuestro reciente comunicado sobre esta alianza minera perversa, aquí:
https://olca.cl/articulo/nota.php?id=111184