La Cifra de la Vergüenza: El Empleo, Moneda de Cambio del Capitalismo Chileno
La brutalidad del modelo socioeconómico chileno no cesa. Mientras los grandes conglomerados empresariales llenan sus arcas con cifras de utilidades históricas, las y los trabajadores somos arrojados a la calle con el cínico argumento de las «Necesidades de la Empresa».
Los fríos números de la Dirección del Trabajo (DT), que por lo demás no registran el total de despidos, son un puñetazo en la cara de la clase trabajadora: en lo que va del año, la cifra acumulada de despidos bajo esta causal es la más alta desde el fatídico 2020, el año de la pandemia, cuando la economía se detuvo. Solo hasta julio, las “desvinculaciones” por esta excusa legal patronal ya superan las 297 mil 500 personas, una verdadera masacre laboral que se intensifica mes a mes, con aumentos interanuales que superan el 18%.
Este incremento sostenido es el síntoma inequívoco de la lucha de clases en el ámbito económico: la patronal, organizada y codiciosa, se niega a compartir la riqueza generada por el esfuerzo de nuestra clase. Prefieren el ahorro inmediato de costos, la precarización y la amenaza constante del desempleo para disciplinar a la fuerza laboral, incluso cuando los balances de sus corporaciones están en verde intenso.
Los Nombres Propios de la Depredación Empresarial
Esta ola de despidos no es un fenómeno abstracto; tiene nombres y apellidos, y se ha ensañado con gigantes del retail, fundaciones de “caridad” y empresas en quiebra:
Cencosud: Despedir con el Bolsillo Lleno
El holding del retail, propiedad de la familia Paulmann, es el ejemplo más flagrante del sabotaje patronal. Los sindicatos, agrupados en la Coordinadora de Cencosud, han denunciado una masiva ola de despidos (cercana al millar solo en las últimas semanas en Jumbo, Paris y Easy), ejecutada bajo la causal de «Necesidades de la Empresa».
¿Cuál es la necesidad real? Ninguna que afecte a la cúpula empresarial. Los trabajadores han alzado la voz, destacando que el consorcio ha obtenido utilidades millonarias, con cifras que superan los $195 mil millones en el período reciente. Mientras la patronal se regocija en ganancias récord, despide a trabajadores y trabajadoras, muchas de ellas mujeres y mayores de 50 años, para supuestamente «modernizar» o «automatizar» procesos. Esto no es modernización: es fraude laboral y una maniobra para reemplazar puestos estables por mano de obra más barata y sin derechos.
La Polar: El Capital que Explota hasta la Muerte
La situación de la Polar es el rostro dramático del capitalismo que explota al máximo hasta quebrar. Acosada por escándalos y un manejo financiero oscuro, la empresa se declaró en insolvencia. Las desvinculaciones y la incertidumbre que viven sus trabajadores y trabajadoras no son más que la consecuencia directa de un modelo empresarial basado en el lucro a cualquier costo, donde quienes pagan los platos rotos al final son siempre los mismos: la clase obrera.
Hogar de Cristo: La Mercantilización de la Pobreza
La Fundación Hogar de Cristo, supuestamente de beneficencia, también se ha sumado a la ola de precarización. Con la excusa de una «estrategia social», la fundación cerró alrededor de 30 programas, lo que implicó el despido de casi 400 trabajadores y trabajadoras. Los sindicatos denuncian que esta acción golpea principalmente a mujeres y jefas de hogar, demostrando que, incluso en el ámbito de la caridad, prima la lógica rentista y la mercantilización de la pobreza por sobre el humanismo y la dignidad laboral.
La Criminal Contradicción: Nuestros Despidos, Sus Ganancias
La causa de fondo de esta crisis laboral es la voracidad empresarial por acrecentar la plusvalía. Revisemos los datos de las ganancias corporativas, que revelan la obscena contradicción que alimenta la indignación popular:
- Utilidades Bursátiles Récord: Las grandes empresas chilenas (aquellas que reportan a la Comisión para el Mercado Financiero) cerraron el año con un alza en sus ganancias, totalizando más de US$ 23 mil millones. (comparemos con la cifra que los futuros gobernantes quieren disminuir del gasto social, US$ 6 mil millones, de todo el “presupuesto de la nación”)
- Sectores Especulativos al Alza: Bancos, energía y grandes retail como Falabella (con un alza de utilidades de casi 700% entre 2023 y 2024) cosecharon beneficios exorbitantes. Los bancos, por sí solos, sumaron más del 28% de los beneficios del IPSA.
La correlación es directa y brutal: los patrones despiden para optimizar la ganancia del accionista. Usan el fantasma de la «necesidad» para recortar costos laborales y así inflar aún más sus ya abultadas cifras de utilidades. La clase capitalista chilena demuestra una vez más su desprecio por la vida de quienes producen la riqueza, tratando a los trabajadores como meros números desechables.
¡No Aceptamos su Fraude!
Frente a este ataque concertado de la patronal, la única respuesta posible es la unidad clasista, la movilización y el combate directo. Que la crisis la paguen los capitalistas, no el pueblo trabajador.
¡A Organizarse, a Luchar y a Recuperar la Dignidad!
¡A la calle, compañeros y compañeras! ¡Por la derogación del artículo 161 y por la estabilidad laboral!
¡La Lucha es el Único Camino!
A fortalecer la corriente sindical clasista y combativa
Asociación Intersindical de Trabajadores y Trabajadoras Clasistas – AIT
Chile, octubre, 2025











