por Periódico La Huelga, 14 de julio de 2019.
LA CUMBRE DE LOS PUEBLOS 2019
El día de ayer, tras la consigna “Salvemos la tierra, cambiemos el sistema”, se realizó la Cumbre de los pueblos 2019. En la instancia, participaron unas 80 personas, entre las que se contaban organizaciones socioambientales, de pobladores/as y campesinas de distintos lugares del país.
La jornada se dividió en dos bloques de exposición y discusión, en los cuales se dio cuenta de las dimensiones ambientales de la crisis capitalista a nivel mundial y nacional, las responsabilidades de los empresarios y el gobierno en ella, y la urgencia de emprender, por parte de las clases, comunidades y territorios, explotadas/as y oprimidas/as, su superación.
En la primera ronda presentaron Lucía Sepulveda de Chile Mejor sin TLC, Gustavo Ruz de Asamblea Constituyente, Eduardo Giesen de Viento Sur, Michelle Donoso de Mujeres Choreras de Talcahuano y Milena Báez de la Red Territorial de Choapa, destacando entre las intervenciones, los llamados a enfrentar la APEC y la COP de este año, a reconocer el rol fundamental de las mujeres en la lucha de las comunidades por el medioambiente, a echar por tierra la constitución y establecer una asamblea constituyente, y a articular las luchas y la solidaridad internacional.
En el segundo bloque, expusieron los/as compañeros/as del Movimiento de Pobladores/as Vivienda Diga, Jerónima Monroe y Martín Rojas, Viviana Catrileo de ANAMURI, Valentina Bonaviez del Movimiento por el Agua en Paine, Marielu Avendaño de la Escuela Agroecológica Germinar, Rolando Rojas del Cabildo del Agua y Lorena Donaire de MODATIMA petorca, quienes pusieron sobre la mesa el derecho a la ciudad justa, la necesidad de un proyecto de clase y socialista para enfrentar la devastación capitalista que el gran empresariado está llevando a cabo contra los ecosistemas y las comunidades en distintas zonas del país.
Es de esperar que estos encuentros, como las acciones que se realizarán a propósitos de las cumbres internacionales de este año, vayan perfilando, a cada paso, un programa cada vez más claro y unificado de lucha, que nos permita dar la pelea, no solo en oposición a los planes de la devastación capitalista, sino, sobre todo, por su urgente y necesaria superación.