Arturo Alejandro Muñoz
¿Qué diablos es el “Tururicuá”? ¿Y el Pactiruriru? Nada, pues, no es nada, quizás sólo sea un intento de inventar algún juego para distraer y engañar a niños traviesos. Solo eran versitos musicales que antaño cantaba ese muy buen dúo humorístico chileno llamado “Los Caporales”, Lucho Arenas y Lucho Pinto.
Eso mismo hacen hoy algunas tiendas partidistas del caleidoscopio político chileno; recitar el ‘Pactiruriru” para engatusar al respetable partiendo de la base que ese ‘respetable’ es bobalicón y gozará con los versitos de marra, aplaudiéndolos incluso. Pero, en realidad, no hay nada de gracioso en ello cuando se utiliza ladinamente para esconder u omitir asuntos de verdadera importancia nacional.
Es que la política, en cuanto actividad fundamental para el buen desarrollo de la democracia, ha sido hoy travestida en una amalgama de circo y estulticia farandulera donde abundan bufones y tartufos que creen que el centro del mundo pasa por sus ombligos, y que el resto de la sociedad debe respetarlos y aclamarlos cual si fueran la créme de la créme.
Las estadísticas no mienten. Ellas muestran a la oposición política al actual gobierno de Gabriel Boric con tan solo 10% de aceptación…es decir, uno de cada diez ciudadanos considera que esa oposición (derechista) está en lo correcto, que es creíble y respetable. Solo uno de cada diez…10%. Pero, muchos parlamentarios y dirigentes de ese sector, cuando son interpelados por un elector, o por un periodista, eluden responder con la verdad y prefieren, una vez más, tomar la guitarra y entonar el Pactiruriru hasta marear a la audiencia. Luego, piden aplausos.
Con la entonación del Tururicuá los inefables parlamentarios de la UDI, RN, PR, Amarillos y Evopólis, van levantando la carpa del circo donde estrenan nuevas acusaciones constitucionales, interpelaciones estériles (pero muy cómicas) y payaseos varios, todo lo cual les permite evitar el trabajo en serio y mantener al gobierno (ergo, al país) estancado severamente.
Pareciera que el antiguo y excelente dúo humorístico Los Caporales’ hubiese regresado desde las décadas de 1960 y 1970 para servir de involuntarios asesores a las bancadas derechistas.
El Pactiruriru y el Tururicuá están de regreso…esta vez en las tablas del escenario de la política criolla y en las voces y actuaciones de distinguidos representantes, como Rodolfo Carter, Cathy Barriga, Francisco Orrego, Luis y Juan Pablo Hermosilla, Evelyn Matthei, Marcela Cubillos, Andrés Chadwick y otros destacados nadadores de aguas turbias.
- Los Caporales y el Pactiruriru
- https://www.youtube.com/watch?app=desktop&v=3mKfNYk5v1g