por Lucía Sepúlveda
Se conoció la cuenta pública del Fiscal Nacional, Ángel Valencia, qujen habló de cómo combate los crímenes que han tenido impacto nacional e internacional «sin excepciones ni distinciones». Pero no hubo ni una palabra sobre Julia Chuñil, que en una semana cumplirá 6 meses desaparecida en medio de amenazas de un terrateniente, sin que la investigación apuntara a nadie más que a revictimizar a la familia.
El Fiscal Valencia está representando una justicia patriarcal, racista y clasista que avala la impunidad ante la desaparición de una mujer mapuche, campesina, defensora de la tierra y las aguas, y además, de la tercera edad.
A mi me pica tanto la cabeza como a ti. Yo sufrí mucho cuando mi madre se enfermó, y cuando partió a descansar, quería irme con ella. Me imagino cuánto estarán padeciendo su familia especialmente sus hijos. Puro simbolismo de parte de los gobiernos cuando se acuerdan de los mapuche. Hasta bailan imitando sus danzas. ¿Quién no se acuerda del show de la señora Bachelet en el patio de la Moneda? Pero ya no me sorprende la actitud de esta gente. Se nota cuando sus raíces no están en estas tierras. Pero más se nota el amor que le tienen a la plata por sobre el sufrimiento ajeno.