Presentes en el país hace más de cien años, la familia Menéndez controla grandes áreas de la economía y sus miembros han estado vinculados tanto a la matanza de indígenas como a la dictadura de Pinochet. Hoy son investigados por presuntos pagos irregulares a políticos durante la tramitación de la Ley de Pesca.
Por Antonia Orellana
A través del decreto Nº1040, promulgado en Santiago el 27 de mayo de 1975 y publicado en el Diario Oficial de la República de Chile del 6 de junio, el dictador Augusto Pinochet Ugarte cambió el nombre de la calle Valdivia en Punta Arenas. El motivo era el centenario de la llegada del inmigrante asturiano José Menéndez a la ciudad. La calle lleva su nombre hasta el día de hoy, pese a que distintas investigaciones históricas han revelado el rol de Menéndez, conocido en 1875 como “el rey de la Patagonia” como ejecutor del genocidio selk’nam en el territorio austral de Chile y Argentina.
Quienes convencieron a Pinochet del cambio de nombre fueron dos nietos del “rey de la Patagonia”: el historiador Armando Braun Menéndez -quien acusa en sus libros a los selk’nam de provocar su propia muerte producto de sus pobres hábitos alimenticios- y Enrique Campos Menéndez -escritor y principal asesor cultural del dictador, responsable de redactar junto a Jaime Guzmán los “Principios del gobierno militar” y de idear las reformas curriculares y simbólicas del régimen-, quien pasó a la historia como quien recibió el Premio Nacional de Literatura que debió haber sido para José Donoso.
Hoy existen tres grandes ramas de la familia Menéndez: los Izquierdo Menéndez, los Lecaros Menéndez y los Menéndez Ross. Sus grupos de empresas tienen sede en un único lugar: el edificio Atlantis, ubicado en El Bosque 0440, que construyeron junto con el grupo Penta. Entre los tres grupos familiares abarcan partes importantes del negocio inmobiliario, forestal, naviero, agrícola y pesquero chileno. Además, a través de sus grupos Coloso -Lecaros Menéndez, que comparte propiedad de Corpesca con los Angelini- y Marfood -de los Izquierdo Menéndez, compuesta por Alimar y Foodcorp- controlan el 50,19% de la cuota de pesca de jurel a nivel nacional.
El rol de los Menéndez en la historia de Chile
Alexander Mc Lennan, más conocido como “El Chancho Colorado”, fue el capataz y mano derecha del asturiano José Menéndez Menéndez en la Patagonia. De acuerdo al historiador español José Luis Alonso Marchante, el origen del poder de Menéndez estuvo en el control de la industria de la lana de oveja. En su libro “El Rey de la Patagonia” (Catalonia, 2014), el investigador explica cómo, primero a través de las alianzas matrimoniales con los Braun y luego mediante la matanza de indígenas, Menéndez creó un imperio económico que heredaron sus descendientes. Así, en el texto se puede leer que por cada selk’nam asesinado el “rey de la Patagonia” pagaba una libra esterlina, y que su capataz McLennan amasó así una considerable fortuna.
En otra investigación, “El genocidio Selk-nam, nuevos antecedentes” de Mateo Martinic (Instituto de la Patagonia, 1990) se transcribe una carta enviada por el escocés James Robbins en 1898 que retrata el modus operandi de la matanza de selk’nam. “Tenemos quince soldados aquí cuyo deber es cazar indios. Ocho de nosotros salimos de aquí una noche y viajamos al sur, pasado Punta María, con un indio que nos guía, llegamos al punto más cercano al campamento indio, dejamos los caballos y caminamos una hora y veinte minutos a través del monte y pillamos alrededor de setenta. Voy a correr el velo sobre los siguientes cinco minutos y dejarlo que suponga el resto”, explica la misiva.
A su muerte en 1918, Menéndez Menéndez tenía un millón de cabezas de ganado, su Sociedad Importadora Exportadora de la Patagonia S.A. contaba con más de veinticinco sucursales bancarias y mercantiles en todos los puertos de la Patagonia y Tierra del Fuego, además de una sede central en Buenos Aires y medio centenar de barcos a vapor para la naviera “Menéndez Behety”. Esta última fue bautizada en honor a su hijo José María y su esposa, la uruguaya María Behety. El hijo de ambos y nieto del “rey de la Patagonia”, Julio Ricardo Menéndez Behety, es el abuelo de los actuales controladores de las empresas familiares de los Menéndez en Chile.
Así, su hija Graciela Menéndez Préndez se casó en 1937 con Roberto Izquierdo Phillips, dueño de Pinturas Ceresita. De su matrimonio nacieron trece hijos. De ellos, los que siguieron con la “veta empresarial” heredada del tatarabuelo José fueron Matías (dueño de la constructora Bravo, Izquierdo y Fuenzalida), Roberto (quien fuera presidente de Sonapesca, consejero de la Corma y presidente de Forestal y Papelera Concepción), Fernando (quien tiene parte en Ceresita y Puerto Ventanas), Santiago, (con parte en Los Peumos S.A. que participa en la propiedad de Entel) y Vicente (46, presente en el negocio pesquero). De esta rama familiar es, además, la Fundación de la Santa Fe, que tiene dos colegios y un hogar de ancianos gratuito en Talcahuano y San Antonio.
Diego y Julio Izquierdo Menéndez (este último fallecido en Lima en 1979) participaron en el atentado que acabó con la vida del general constitucionalista René Schneider el 22 de octubre de 1970. El asesinato, que buscaba crispar el clima político para evitar que Allende ascendiera al poder mediante la confirmación del Congreso, contó con participación de militares golpistas como el general Viaux y civiles vinculados al grupo terrorista de derecha Patria y Libertad. Entre esos últimos estaba León Cosmelli, un viejo conocido de Punta Arenas de los Izquierdo Menéndez. De acuerdo a la investigación hecha por el fiscal militar, general Orlando Urbina, los Menéndez, a diferencia de Cosmelli, sólo fueron “conspiradores” y no dispararon armas contra Schneider. Una vez concretado el atentado, según ha establecido la periodista María Olivia Monckeberg, los civiles se refugiaron en la Parroquia El Bosque con la venia del padre Fernando Karadima, en ese entonces de irreprochable fama. Luego de que muriera Schneider, los Izquierdo Menéndez abandonaron Chile y se dirigieron a Buenos Aires, donde fundaron una agencia de publicidad. Volvieron después del golpe de Estado y fueron indultados del crimen por puño y letra de Pinochet.
Otro de los Izquierdo Menéndez, Roberto, quien hoy es consejero de Corma y la Sofofa, además de ser parte del Diario Financiero, debió declarar el año pasado por la matanza de 19 trabajadores de Laja, San Rosendo y Yumbel, ocurrida en septiembre de 1973. Un mes después los cuerpos fueron encontrados en el Fundo San Juan, propiedad de la Forestal Mininco (CMPC, Grupo Matte) de la cual Roberto Izquierdo era gerente. Según los familiares de las víctimas, siempre estuvo al tanto de lo ocurrido.
La poderosa ramificación de los Menéndez en la economía
Hasta 1995 SIPSA Sociedad Anónima concentró las inversiones de los Lecaros Menéndez, Izquierdo Menéndez y Menéndez Ross. Ese año los Lecaros y Ross compraron la parte de los Izquierdo y luego se dividieron en partes iguales la sociedad. Luego, los Lecaros Menéndez se concentraron en Duncan Fox S.A. Allí esa rama familiar posee una fuerte parte del negocio pesquero: es propietaria de Coloso S.A., que desde 1999 es parte de Corpesca junto con el grupo Angelini. Corpesca domina absolutamente la zona norte de Chile en lo que a pesca se refiere, y sólo en cuanto a jurel tiene el 31,37% de la cuota. Además tiene el dudoso honor de ser la empresa que abrió el ciclo de investigaciones por financiamiento irregular de la política, luego de que en 2013 se revelaran sus pagos a la diputada Marta Isasi. Hoy Isasi se encuentra formalizada por el Ministerio Público, al igual que al desaforado senador Jaime Orpis (UDI), quien recibió $233 millones de Corpesca.
La sociedad Duncan Fox de los Lecaro Menéndez tiene, además, el 99% de las acciones de Alifrut S.A., empresa que en Chile comercializa las marcas Minuto Verde y La Cabaña, además de exportar congelados y berries a mercados relevantes como Estados Unidos, Japón y Europa. Este giro agrícola significa el 37,8% de sus activos totales de acuerdo a sus estados financieros. A través de Talbot Hotels, los Lecaros Menéndez manejan la representación en Chile de Holiday Inn, con presencia en Iquique, Antofagasta, Santiago (El Golf y Aeropuerto), Concepción, Temuco y Puerto Montt, a los que se suma otra sede hotelera en Buenos Aires, Argentina. Además, a través de su filial argentina Ayres manejan negocios inmobiliarios en el sector norte de Buenos Aires, Pilar, hacia donde se han extendido los barrios de la clase alta porteña. En las dos últimas décadas impulsaron el desarrollo inmobiliario de La Dehesa, con condominios como Las Pataguas. En total, el grupo Lecaros Menéndez sumó US$ 149,138,528 millones de dólares en ingresos durante el último semestre del 2015 y es el catorceavo grupo económico más grande de Chile de acuerdo al ranking UDD que considera crecimiento de patrimonio, ingresos y activos.
En cuanto a los Menéndez Ross, tienen participación en el negocio inmobiliario argentino y en la industria naviera a través de SIPSA S.A., firma que conservaron luego de la salida de sus primos en primer grado. En 2014 vendieron el 17% que mantenían en Ultrapetrol, una transnacional de transporte industrial marino, transacción que les reportó utilidades de US$ 34 millones de dólares ese año. Además, a través de su subsidiaria argentina Inversiones Los Andes forman parte del negocio inmobiliario a través de la venta de sitios urbanizados y macrolotes de terrenos a desarrolladores locales. Conocidos por su perfil hermético, los líderes de esa rama son Felipe y Ricardo Menéndez Ross.
En contraste, los menos herméticos son los Izquierdo Menéndez, cuyo hermano Roberto es conocido por sus controversiales opiniones como consejero de SONAPESCA. Sólo en el último trimestre del 2015, el patrimonio bursátil del grupo Izquierdo Menéndez sumó $ 46,997,400 millones de pesos. Están presentes en el sector pesquero a través de Alimar y Sociedad Pesquera San Antonio (SOPESA), dos de las empresas más antiguas del rubro. A través de Alimar y Foodcorp conforman Marfood, que tiene por sí sola el 18,82% de la cuota nacional de jurel.
Luego de que en julio Informe Especial revelara los pagos de la Federación de Industria Pesquera del Sur (FIPES) al diputado Iván Fuentes (DC), las indagatorias de la Fiscalía han ido ampliándose a nuevos ámbitos de la industria pesquera. Entre ellas se encuentra la agrupación a la que pertenecen las empresas de los Izquierdo Menéndez: la Asociación de Industriales Pesqueros (ASIPES). En agosto se le solicitó la contabilidad a ocho de sus empresas.
La llamada “arista ASIPES” del caso Corpesca surgió luego de que La Tercera revelara la “marca personal” de las distintas asociaciones gremiales de las empresas pesqueras a parlamentarios en el marco de la tramitación de la Ley de Pesca en 2012. En el caso de ASIPES, Luis Felipe Moncada y Francisco Mujica mencionan en sus correos a diputados como Orlando Vargas (PPD), Cristian Campos (PPD), José Miguel Ortiz (DC), Jorge Sabag (DC) y los senadores Marta Isasi (UDI) y Miodrag Marinovic (IND).
Los documentos solicitados son declaraciones de impuestos a la renta, sus rectificatorias y las boletas de honorarios correspondientes a esas aclaraciones de impuestos. En el caso de Alimar, de los Izquierdo Menéndez, rectificó sus declaraciones de 2010, 2011 y 2012. El Desconcierto consultó en ASIPES respecto a si ya se hizo efectiva la entrega de la información, pero no tuvo respuesta.
En forma paralela a la investigación del caso Corpesca, la Fiscalía Nacional Económica lleva adelante una indagación por presunta colusión y abuso de posición dominante contra Alimar, la que se encuentra en curso. En esta empresa se asoció con la noruega Mogster y juntos formaron Marfood. Con eso, su porcentaje en la cuota de pesca nacional se elevó a 22,9%, 10,4% de la noruega y 12,5% de Alimar. Además, el 1 de agosto pasado la Corte de Apelaciones de Concepción falló en contra de la misma empresa por simulación de contrato en una querella interpuesta por la Federación de Trabajadores Pesqueros (FETRAPES).
Aparte del negocio pesquero, los Izquierdo Menéndez ingresaron al sector forestal a través de Forestal y Papelera Concepción (FPC), que en 2015 cerró contrato con Unimarc de SMU (Grupo Saieh) y está presente en todos sus puntos de venta con sus marcas de papeles tissue Mi Hogar y Swann. Además, entraron en una fuerte disputa con los Matte cuando, luego de que se revelara la llamada “colusión del confort”, lanzaran el papel “5 Ilusión” aludiendo irónicamente a la concertación de precios entre “La Papelera” y SCA.
En 2014 el Congreso, por una moción del diputado Gabriel Boric, solicitó cambiar el nombre de la calle José Menéndez en Punta Arenas. La iniciativa causó polémica en la ciudad austral, y no prosperó por el rechazo de los comerciantes de la calle, que temían se afectaran sus ventas. Los hermanos Julio y Diego Izquierdo Menéndez nunca fueron sentenciados por su participación en el asesinato político de un general de la República. De hecho, Diego ganó notoriedad en 2011 pero por temas deportivos: fue el corredor de más edad en la versión del Rally Dakar de ese año y los medios destacaron su amoroso apodo de “Viejito Pascuero”.
A inicios de este año, Roberto Izquierdo concedió una entrevista al diario Pulso. Allí, consultado por las indagaciones de la Fiscalía Nacional Económica a sus empresas pesqueras, el nuevo patriarca de los Menéndez respondió que “¡Que hagan toda la investigación que quieran! Es imposible que haya colusión. Los pescadores artesanales son muchos y los compradores industriales también. No sé si hay un tema político aquí. No le asigno ninguna seriedad a esta cuestión. Si hay alguien que quiera revolver el gallinero, que investiguen”.