Ver: Columna de Hugo Rodriguez «ALGO MAS DE LA GUERRA ISRAEL, IRAN, USA»

1. La guerra es mala, pero la paz absoluta en un sistema capitalista es peor, porque perpetua el poder hegemónico de la oligarquía. La abolición de la propiedad privada del suelo en un país como Chile, por ejemplo, elimina las desigualdades sociales, asegura el alimento de la población, y acaba con la migración forzosa de los que no les queda otra alternativa. La democracia en un sistema neoliberal mantiene el status quo burgués. La vía pacífica para conseguir la justicia social que necesitan los pobres alarga la agonía de los pueblos. Solo una revolución liberará a los oprimidos del yugo del gran capital. El miedo, generalmente, viene de la falta de conocimiento. Decir que un alzamiento popular traerá muerte y calamidad, es negar los crímenes ocurridos a manos de la represión en 35 años de supuesta democracia. Del 73 hasta ahora ha muerto y desaparecido más gente, sin contar las condenas criminales a los que luchan por causas justas, que las que ocurrirían si los pueblos se unieran en franca lucha contra la opresión.

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