Moscú. Miles de rusos protestaron el domingo por la decisión del gobierno de aumentar la edad de jubilación, pero no hubo manifestaciones en las ciudades anfitrionas del Mundial debido a las restricciones de seguridad vigentes durante el torneo.
Las protestas del domingo fueron dirigidas por partidarios de Alexei Navalny, el crítico más prominente del Kremlin.
Navalny dijo que sus partidarios organizaron protestas en 39 ciudades de todo el país, desde la costa del Pacífico hasta Murmansk, cerca de la frontera con Noruega. La mayoría de los mítines habían sido aprobados por las autoridades locales, y no hubo informes de arrestos.
Navalny publicó fotos de las protestas con personas que portaban pancartas con consignas que incluían «eleven la pensión, no la edad de jubilación» y «¡Saquen las manos de nuestras pensiones!».
También hubo algunas protestas callejeras organizadas por otras fuerzas políticas, incluidos los comunistas.
El primer ministro Dmitry Medvedev, un aliado cercano del presidente Vladimir Putin, dijo el mes pasado que el gobierno quería elevar la edad de jubilación para los hombres en cinco años, de 60 a 65, y en ocho años para las mujeres, de 55 a 63.
La razón esgrimida para la reforma propuesta fue aliviar la presión sobre las arcas del Estado. Los críticos dicen que la edad de jubilación en muchas regiones es más alta que la esperanza de vida. Según algunos sondeos, la aprobación de Putin cayó del 75 al 69 por ciento tras el anuncio de los planes.
Bajo un decreto presidencial emitido para allanar el camino para la Copa del Mundo, Putin introdujo mayores medidas de seguridad en las 11 ciudades que albergan partidos. Eso le dio poderes adicionales a las autoridades locales para prohibir las manifestaciones.