De Hugo Cabieses, (*)
Perú 3.8.2121
Seguramente varias/as van a estar en desacuerdo conmigo por lo que escribo a continuación:
1). Está comenzado un proceso popular que no teníamos desde los años 1968-1975, que fue digitado por militares y algunos civiles, desde arriba y sin instituciones democráticas.
2). Los procesos populares son como lo que estamos viendo y sufrimos por ello: caóticos, tumultuosos, contradictorios, incompletos siempre, con muchas dudas, inconsistencias, cambios súbitos de liderazgos y esperanzas frustradas.
3). He tenido la suerte y el honor de participar y observar tres proceso de este tipo: Nicaragua en 1979, dirigido por el FSLN; Brasil en 2004, dirigido por el PT con Lula; y, Bolivia en 2006, dirigido por el MAS y Evo. Estos tres procesos fueron caóticos, abigarrados y contradictorios en donde no se sabía cómo darle gobernabilidad al país.
4). Como era de esperarse, estamos sufriendo los embates de las mafias, de la DBA, de la DDD (derecha disque democrática), de los fuji-montesinistas y los narco fascistas a nivel nacional e internacional, en este caso con el marqués Vargas Llosa aliado con la CIA-Pantagon de Miami.
5). Pero también sufrimos las corrosivas críticas en medios y redes sociales de la IDA (izquierda democrática arrepentida), incluso de muchos socialistas y progres.
6). Me preocupan estos últimos y creo que se están fijando en los árboles y no en el bosque, que es el proceso popular, su significado geopolítico y sus propuestas programáticas. Por supuesto que las críticas hay que hacerlas, pero cuidando el bosque.
7). El Plan Perú al Bicentenario sin corrupción, el mensaje presidencial del 28 de julio y el mensaje del Canciller el día de ayer, son los documentos programáticos que debemos estudiar y convertirlos en acciones concretas.
8). La gran confusión y los errores es propia de los gobiernos que se inician, más aún con los que son producto de movilizaciones populares como en este caso. Hay que mirar el bosque y no solo los árboles.
9). Nicaragua 1979, Brasil 2004 y Bolivia 2006, eran un caos total, con marchas y contramarchas, indefiniciones y demoras en la gobernabilidad. Luchar contra el establecimiento de años de ideología neoliberal, impuesta desde afuera y arriba, es recontra jodido y cuesta arriba.
10). El Gabinete de ministros es así: 5 de Perú Libre, 3 de Juntos por el Perú, 2 del Frente Amplio y 10 Independientes. ¿Queremos más? Sumen otros y otras en cargos en la administración pública, que requiere la designanacion de no menos de 350 técnicos-políticos.
11). Los ministros de la “izquierda proge popular” son 8, incluyendo a Héctor Béjar el canciller, el ministro de trabajo y el de Agricultura (cusqueño de la CNA).
12). No es ni será un camino de rosas y la lucha de clases es lo común: una clase oligárquica, racista, mafiosa, discriminadora, patriarcal y violenta que no quiere dejar que le arrebaten sus privilegios, contra una clase tumultuosa, con liderazgos en construcción, varias ideologías y líneas programáticas diferentes y contrapropuestas, seguros de lo que NO quieren, pero poco concretos con los que SI quieren.
Esto recién comienza … Salvo error u omisión.
(*) Hugo Cabieses, encargado de Relaciones Internacionales del Partido Socialista del Perú. El PS es integrante de la coalición de izquierda Juntos por el Perú y Nuevo Perú