por Felipe Portales
En «El Mercurio» de ayer [16 de octubre de 2021] me publicaron la carta siguiente que, sin duda, será de interés para ustedes:
NEOLIBERALISMO I
Señor Director: Desgraciadamente, Carlos Williamson tiene toda la razón. En efecto, «la Concertación administró el modelo heredado del régimen militar». Basta ver que luego de sus gobiernos se legitimaron y consolidaron todas las instituciones y estructuras económico-sociales implantadas por aquel régimen. Y Williamson acertadamente revela el crudo reconocimiento de lo anterior hecho por Edgardo Boeninger en 1997, en su libro «Democracia en Chile. Lecciones para la Gobernabilidad».
Además, a lo largo de los años ha habido muchos reconocimientos análogos efectuados por numerosos líderes concertacionistas. Quizás el más elocuente fue el realizado por Alejandro Foxley en entrevista a la revista Cosas del 5 de mayo de 2000: «Pinochet realizó una transformación en la economía chilena, la más importante que ha habido en este siglo. Hay que reconocer su capacidad visionaria y la del equipo de economistas, con Sergio de Castro a la cabeza, que fueron capaces de abrir la economía (chilena) al mundo, descentralizar, desregular, etcétera. Esa es una contribución que va perdurar por muchas décadas en Chile y que, quienes fuimos críticos de algunos aspectos de ese proceso en su momento, hoy lo reconocemos como un proceso de importancia histórica para Chile. Además, ha pasado el test de lo que significa hacer historia, pues terminó cambiando el modo de vida de todos los chilenos, para bien, no para mal. Eso es lo que yo creo y eso sitúa a Pinochet en la historia de Chile en un alto lugar».
Y al final Foxley puntualiza: «Su drama personal (de Pinochet) es que, por las crueldades que se cometieron en materia de derechos humanos en ese período, esa contribución a la historia ha estado permanentemente ensombrecida».
Felipe Portales
