Por Adán Salgado Andrade
Actualmente para los judíos ultranacionalistas y ultraderechistas, cualquier crítica sobre cómo tratan a los palestinos es “antisemitismo”, o sea, que se está en su contra.
Evaden hablar sobre los tratos inhumanos que les dan, cómo los tienen encerrados en barrios amurallados, como si fueran modernos campos de concentración. Los palestinos tienen diariamente que pasar por varios retenes, para ir a sus trabajos o escuelas, tanto de ida, así como de regreso (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2012/04/el-holocausto-palestino-manos-de-israel.html).
Hacen vialidades, con tal de dividir el territorio palestino (todavía no reconocido como país), y tienen el cinismo de pasarlas por sus tierras (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2020/12/israel-construye-autopistas-para-que.html).
Los infames bombardeos judíos, por cualquier pretexto, dejan decenas de muertos y destruidos edificios y casas entre los pobres palestinos, que con trabajos los han hecho (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2021/08/ataques-judios-gaza-han-dejado-miles-de.html).
Las ciudades palestinas están llenas de ruinas y cascajo, por esos constantes bombardeos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/01/los-incesantes-ataques-judios-gaza-han.html).
Por si fuera poco, los expulsan los militares de sus tierras para hacer “prácticas militares” (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2022/08/israel-expulsa-palestinos-de-sus.html).
Pero, como dije, no se les puede criticar, pues es antijudío hacerlo. Una cínica, deleznable posición, que usan solamente para seguir cometiendo las atrocidades cotidianas contra los palestinos. Justo era el acoso que hicieron los nazis en su momento contra los judíos, que se hacían redadas y los arrestaban por ser eso, solamente por ser judíos (ver: http://adansalgadoandrade.blogspot.com/2019/06/el-tercer-reich-el-gran-negocio-de.html).
Los actuales judíos de ultraderecha y ultranacionalistas, repiten la historia.
Y ahora que el mafioso, corrupto, supremacista Benjamín Netanyahu regresó al poder, está permitiendo que los grupos más nefastos de ultraderecha, hagan de las suyas, concretamente, que sigan asediando a los palestinos. Incluso, ya autorizó que se construyan más asentamientos judíos en tierras palestinas, ilegalmente, lo cual está en contra del derecho internacional. Pero a ese nefasto y a sus esbirros, les tiene sin cuidado (ver: https://en.wikipedia.org/wiki/International_law_and_Israeli_settlements).
Toman cualquier pretexto para despojarlos de sus tierras, a pesar de que han vivido los palestinos en ellas, ancestralmente, mucho antes de que a los judíos se les otorgara, por la fuerza, la mitad de lo que era Palestina en 1947. Sólo imaginen si a México le quitaran la mitad del territorio para establecer, digamos, la República Afroestadounidense, con tal de que los supremacistas estadounidenses se deshicieran de todos los afroestadounidenses, a los que tanto odian. Sería totalmente ilegal. A eso podría haber equivalido esa infamia.
Lo peor, como dije, es que la mafia ultraderechista y ultranacionalista, comandada por Netanyahu, está alentando el equivalente judío de supremacistas de EU, a atacar a palestinos, ir a sus casas, apedrearlas, quemarlas, junto con sus autos, a ir a las huertas de campesinos, arrancar o cortar sus árboles y muchas otras bajezas. Es como lo que alentó Donald Trump, cuando, según él, hubo “fraude” al perder ante Joe Biden, a que hordas de supremacistas atacaran la casa Blanca en enero del 2021 (ver: https://en.wikipedia.org/wiki/January_6_United_States_Capitol_attack).
Por ello, cuando estuvo en la presidencia, Trump, no condenó en absoluto los constantes ataques a palestinos que siempre han perpetrado los judíos.
Y es la razón por la cual, personajes críticos de los judíos, que son, a su vez, judíos, están en contra de esos ataques. Uno de ellos, el historiador judío, asentado en Inglaterra, Simon Schama, urge a los judíos ingleses “a condenar el horrible giro que ha dado Israel hacia la ultraderecha” (ver: https://www.theguardian.com/world/2023/mar/05/simon-schama-uk-jews-condemn-israel-far-right-violence-palestinians).
Una mujer palestina, ofreció un testimonio, cuando fue invitada a Inglaterra, para que platicara sobre los problemas cotidianos de violencia que siempre han padecido cotidianamente los palestinos, quienes están prácticamente indefensos ante mafiosas “autoridades” judías que, en lugar de ayudarlos contra los ataques, hasta los alientan más y les dicen que “mejor, váyanse de aquí”.
El artículo del diario The Observer, titulado “’Nos saquean nuestro pueblo por puro gusto’: una granjera palestina cuenta su historia sobre la violencia de los colonos judíos hacia los palestinos”, expone ese grave problema. Está firmado por la propia afectada, Doha Asous, de la que se dice que es “granjera de Nablus, en Gaza, y que fue a Inglaterra para platicar de la agricultura en Palestina y para promover los olivos y el aceite que se produce allí, así como otros frutos, como los dátiles. Ella describe en el artículo su vida durante los recientes actos de violencia contra los palestinos por parte de colonos judíos” (ver: https://www.theguardian.com/world/2023/mar/05/palestinian-farmer-israeli-settlers-west-bank-wiped-out-olive).
Una foto de Doha, de 61 años, abre el artículo. Su consternado rostro, mira a la cámara. Sostiene troncos de sus olivos, que fueron cortados por los judíos, “por puro gusto”. “Muchos de los árboles que me cortaron tenían más de cien años. No puede ser que valoren tan poco lo que nos ha costado tanto trabajo cuidar”, escribe la afligida mujer.
Ella vive en Burin, cerca de Nablus, en donde más de 400 palestinos fueron atacados por hordas de supremacistas judíos, destruyendo y quemando casas, autos, cortando árboles, matando animales y cuanto pudieron. “No es nuevo esto, pero en los pasados días se han intensificado esos ataques. Las tierras que tengo, las heredé de mi padre, que fue asesinado en la guerra de los seis días de 1967 (cuando Israel, nuevamente, se apoderó de más tierras). Nos trajeron su cuerpo para sepultarlo como era debido”.
Dice que esos extremistas, muchos, estadounidenses, están atacándolos para apoderarse ilegalmente de sus tierras, “las quieren gratis. Ya nos tienen rodeados por otros asentamientos ilegales, pero quieren más y más”.
Refiere cómo uno de los nefastos ministros de Netanyahu, Bezalel Smotrich, irónicamente ministro de “cuestiones civiles”, hizo un llamado, junto con los atacantes, para “borrar del mapa a Humara, que es otro pueblo judío” (ver: https://www.aljazeera.com/news/2023/3/1/israel-arrests-settlers-after-anti-palestinian-pogrom).
Toda esa violencia de los supremacistas, fue porque, supuestamente, combatientes palestinos mataron a dos hermanos judíos. Pero ese ataque fue en respuesta a uno previo, en el que, sin dar aviso, militares judíos atacaron una zona palestina, matando a once personas, entre niños y personas de la tercera edad (ver: https://www.jornada.com.mx/2023/02/24/mundo/022n1mun).
No ven los judíos que los ataques palestinos, ellos mismos los provocan con su cotidiana violencia hacia ese oprimido pueblo, que sólo reacciona, aunque no al nivel tan demencial como lo hacen aquéllos.
Dice Doha que no odia a los judíos, ni a los israelíes, “son los violentos colonos el problema, incontrolables y el ejército judío, que tendría que defendernos, supuestamente, se hace de la vista gorda”.
Dice que tiene unos 700 olivos, y que cada vez “es más difícil cuidarlos, por tantas restricciones y que me los cortan a cada rato. Nos racionan el agua. Israel se ha apoderado del 85 por ciento de nuestros acuíferos, tienen reservas para treinta años, nos los quitaron, nos están matando de sed. Y cuando es tiempo de cosechar, sólo nos dejan hacerlo dos días, cuando necesitaríamos dos semanas, como mínimo, para hacerlo”.
El día del ataque dice que fue a ver sus árboles y varios “me los cortaron, tenían cientos de años de vida. Y el que vigila el pueblo, un judío, sólo se acercó para decirme que mis tierras pertenecen a los judíos. ¡Estamos totalmente indefensos!”.
Pero enfatizó que no es nuevo, “que ya estamos habituados a sus ataques, a que por puro gusto corten nuestros árboles, maten nuestros animales. Hasta extranjeros vienen a ayudarnos, pues se dan cuenta de cómo sufrimos ante los judíos. Y hasta a ellos los agreden, no respetan a nadie”.
Pero aun así, Doha dice que seguirá cultivando sus tierras, “lucharé por ellas, cuanto pueda”.
Sí, y eso será, si es que no la mata antes algún maldito supremacista judío, alentado por un loco mafioso en el poder.
Así que, ¿quieren más pruebas de cómo ya estamos viviendo en varios infiernos?
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