Lic. José A. Amesty R.
12-agosto-2021
Lo de las Mesas de Dialogo en Venezuela, entre la oposición y el gobierno bolivariano, han caído en un círculo vicioso, que ya parece risible tal mecanismo, siendo que desde hace años no han resultado parcialmente, proclives o exitosas, para algunos de los dos bandos. Decimos parcialmente, ya que, para el gobierno de algunas Mesas de Debate, salieron las elecciones de la Asamblea Nacional y las venideras mega elecciones.
El gobierno revolucionario, presenta sus puntos a debatir, y la oposición los rechaza. Hasta el punto que, solo en el gobierno del presidente Nicolás Maduro, se han establecido cinco mesas de conversaciones (incluida la de Barbados), una cifra que aumenta, hasta 9 en 20 años, si tomamos en cuenta el gobierno de su mentor y predecesor Hugo Chávez, quien falleció en marzo del 2013.
La ultima-actual Mesa de Discusiones, se plantea para este año, específicamente viernes 13 de agosto, aunque en realidad es una reactivación de una anterior, con la mediación noruega, pero en Ciudad de México.
No ha iniciado, y ya hay preocupación en el gobierno de Venezuela, porque le llama la atención, el silencio de la oposición, a 24 horas de ratificar la instalación de la Mesa de Diálogo en México; mientras que manifestó su preocupación de que la derecha haya mantenido un silencio poco común en las últimas 24 horas tras este anuncio.
Cuando señalamos dialogo entre gobierno y oposición, hay que enfatizar que las conversaciones, según el presidente Maduro, son con los representantes del extremismo opositor, y “A partir de este año retomamos el diálogo con el G4, y ese diálogo tiene un documento redactado. La agenda tiene 7 títulos que se están debatiendo”.
En cuanto al “extremismo opositor”, hay que precisar que hay una “oposición democrática”, representada por Bernabé Gutiérrez, Timoteo Zambrano, Acción Democrática (AD), COPEI, El Cambio, Cambiemos, otros, y la Golpista (Guaidó, Leopoldo López, Julio Borges, otros).
La agenda de conversaciones, tienen dos condiciones para negociar, las de la oposición y las del gobierno, veamos algunas:
Oposición
*Plantea elecciones presidenciales, parlamentarias, regionales y municipales “libres”. Estos comicios deben tener observación nacional e internacional y respaldo externo.
*Entrada masiva de ayuda humanitaria y vacunas contra el COVID-19.
*Garantías democráticas para todos los actores de las fuerzas democráticas y el chavismo, con mecanismos para la reinstitucionalización de Venezuela.
*Liberación de todos los presos políticos, el regreso de los exiliados y justicia transicional, para juzgar delitos cometidos por el gobierno de Nicolás Maduro y sus funcionarios.
*Incentivos para “el régimen” como el levantamiento progresivo de las sanciones económicas, bajo la supervisión de la comunidad internacional si se cumplen las garantías del acuerdo.
Gobierno Bolivariano
*Hará una lista de todos los puntos que llevará y pide incluir a toda la oposición.
*Avala que participen la Unión Europea, el Grupo de Contacto Internacional (conformado por países de Europa y Latinoamérica), además del Reino de Noruega, que en 2019 intentó mediar en un diálogo entre Maduro y Guaidó que fracasó.
*Oposición debe renunciar “al camino del golpismo, del intervencionismo y de llamar a invasiones contra el país”.
*Deben reconocer a todos los Poderes Públicos constituidos. El gobierno, los considera legítimos, pese al desconocimiento de la comunidad internacional del Parlamento del 6 de diciembre o nombramientos que hizo la Constituyente como el fiscal general Tarek William Saab, el contralor Elvis Amoroso y el defensor del Pueblo Alfredo Ruiz.
*Rendición de cuentas de la oposición que lidera Guaidó sobre los recursos que entregó Estados Unidos al gobierno interino.
Otras condiciones
*Sin embargo, dentro del chavismo hay otras voces que también plantean sus condiciones. Uno de ellos es el presidente del Parlamento que controla el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Jorge Rodríguez.
En la sesión del jueves 13 de mayo dijo que la oposición que lidera Guaidó debe “reconocer los crímenes cometidos contra la población venezolana”, por las sanciones económicas que pidió contra la gestión chavista. También “reconocer que se solicitó la invasión del país”.
Le dijo que debía entregar a Miraflores la administración de la filial de Pdvsa en Estados Unidos, Citgo, además de la empresa en suelo colombiano Monómeros.
*El miércoles 12 de mayo el primer vicepresidente del Psuv, Diosdado Cabello, dijo en su programa de televisión “Con el mazo dando” que las únicas elecciones en puerta son las regionales y municipales.
Descartó presidenciales (corresponden por Constitución al año 2024) y parlamentarias, como pide Guaidó en su acuerdo de salvación nacional.
“Hay cosas que no se negocian, si usted tiene argumentos usted se sienta a hablar con quien sea. Nosotros no le tenemos miedo a eso. Nosotros no vamos a negociar el camino por el cual vamos”, expresó.
Sobre las sanciones, Cabello le dijo a Guaidó que las enrollara y se las “metiera en un bolsillo”.
“Ellos dicen elecciones presidenciales, pero las elecciones presidenciales ya las hubo en el año 2018. Y corresponden las nuevas elecciones presidenciales ¿cuándo?, en el año 2024, ya allí eso está claro porque eso está en nuestra Constitución. Los principios no se negocian”, agregó.
*Recordando y en general, el levantamiento de las sanciones impuestas por Estados Unidos, la devolución de los activos que están congelados en el exterior, el reconocimiento de la Asamblea Nacional y los demás poderes púbicos establecidos y que el sector extremista de la oposición renuncie a la violencia.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que su país será la sede del nuevo intento de conversaciones, entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición política de este país.
«Lo que buscamos es que haya diálogo y acuerdos entre las partes», declaró López Obrador.
México ha sido sede de diversos diálogos de reconciliación entre grupos políticos de diversos países, en ese sentido el de Venezuela se ubica como parte de esta tradición.
Así mismo, el nuevo gobierno de Perú emitió un comunicado respaldando el diálogo de México y ofreciendo sus buenos oficios. Atrás quedó el fulano “Grupo de Lima” que promovía el derrocamiento violento del Gobierno de Venezuela y el bloqueo que todavía hoy nos tiene sumidos en la crisis.
“Estamos a favor de toda acción dirigida a contribuir al diálogo necesario entre el gobierno de Venezuela y la oposición, con la finalidad de que se pueda llegar a un acuerdo para la convocatoria de elecciones libres, justas y democráticas. Pensamos que ese diálogo, también, debe servir para crear las condiciones del levantamiento de las sanciones económicas, que sólo afectan las condiciones de vida del pueblo venezolano”.
Finalmente, para este Dialogo, por el momento se reiteran algunas demandas de la oposición, que busca garantías para las elecciones de finales de este año, mientras el chavismo pide que se levanten las sanciones impuestas por Estados Unidos.
Deseamos y somos optimistas, que, para esta nueva ronda de negociaciones, prive la cordura y sindéresis, sobre todo de la oposición, para llegar a un feliz desenlace de esta trama novelesca llamada Mesas de Dialogo.
Enfatizamos que tras varios intentos fallidos son, sobre el papel, las más favorables de los últimos años. Las expectativas, no obstante, son tan altas, como los temores a un fracaso de unas negociaciones que se antojan decisivas.
Sobre la mesa está, una premisa que fue repetida hasta la saciedad, en el proceso de paz de Colombia y generó no pocos dolores de cabeza: “Nada está acordado hasta que todo esté acordado”.