Codigorojo. 18 octubre 2025.
Fuente Radio BB.
La senadora independiente Fabiola Campillai criticó duramente al presidente Gabriel Boric por, a su juicio, no haber cumplido los compromisos asumidos con las víctimas del estallido social. En entrevista con La Tercera, afirmó que “el presidente hizo el 1% de lo que comprometió a las víctimas del estallido, nos defraudó totalmente”.
Campillai, quien perdió la vista, el olfato y el gusto tras recibir el impacto de una bomba lacrimógena en noviembre de 2019, sostuvo que el Ejecutivo no concretó una política real de reparación. “Pensábamos que íbamos a tener la reparación que necesitamos”, lamentó, asegurando que los informes elaborados por las víctimas y organizaciones “nunca fueron leídos” por el Gobierno.
Según la senadora, el proceso se estancó tras el cambio de liderazgo en la Subsecretaría de Derechos Humanos. “En el momento en que Haydée Oberreuter salió del cargo nosotros perdimos la esperanza. Después supimos que no nos habíamos equivocado, porque desde Xavier Altamirano en adelante hubo un trabajo nulo, aunque no es culpa de ellos, aquí el que mandata es el presidente”, señaló.
Campillai también cuestionó el rol que tuvo Boric durante su campaña, cuando —recordó— pidió apoyo tanto a ella como a Gustavo Gatica. “Yo pienso que la votación mayoritaria del presidente fue a causa del apoyo de nosotros. A lo mejor en ese momento él pensó que iba a ser fácil trabajar por los derechos humanos. No sé qué habrá pasado en el camino, se habrá dado cuenta de que no era tan fácil, que la derecha era más firme”, planteó.
A seis años del estallido social, la legisladora advirtió que “una pensión de gracia no es suficiente y varios aún no la tienen”. Añadió que hay víctimas que “aún son discriminadas, que no han podido seguir estudiando, no han podido conseguir un trabajo y que se suicidaron esperando la ayuda tanto del Estado como del gobierno”.
Sra. Campillai, cuando una persona llega a una cierta edad, que podríamos llamar madurez, de por si cambia a una actitud más suspicaz. A estas alturas ya nadie cree en este gobierno, me refiero a la gente que voto por Borich. Hace rato que muchas personas despertaron, desde mucho antes del estallido. Por lo menos en este medio nadie le creyó desde un principio, a partir de la primera voltereta, o una de ellas, cuando se volvió hacia la caballería que tenía a su espalda, con un gesto de apoyo a los mismos que agredieron sin piedad a personas que ejercían el justo derecho a manifestarse. De ahí en adelante quedó claro con quien estábamos tratando. Hace rato que Borich se puso la soga al cuello solito. Y se van sumando más cada día que nos acercamos a las «benditas» elecciones. Nunca es tarde para aprender a reconocer al adversario cuando lo tenemos al frente.