Inicio Cultura y Arte Cine – LA PRIVATIZACIÓN DEL AGUA EN “TAMBIÉN LA LLUVIA”

Cine – LA PRIVATIZACIÓN DEL AGUA EN “TAMBIÉN LA LLUVIA”

510
0

por Pepe Gutierrez-Alvarez, España

Esta es una película que trata del capitalismo sin oposición o sea el neoliberalismo no ha dejado de tratar de tratar de privatizar el agua, dando lugar a la llamada “Guerra del agua”, nombre que tomaron las protestas Cochabamba, entre los meses de enero y abril de 2000 contra el gobierno municipal que “experimentó” la tentativa siguiendo los consejos del Banco Mundial, la multinacional Becchtel con el concurso del tristemente célebre golpista Hugo Banzer, entre otras multinacionales entre las que se encuentra la Nestle, que todavía sigue defendiendo semejante expolio. La historia fue recogida por nuestra Iciar Bollain (Madrid, 1957) .

“También la lluvia” fue rodada con el apoyo de miles de extras (4.000 en total, de ellos) Fue el primer filme que no escribía ella, partía de un guion de Paul Laverty, el guionista habitual de Ken Loach en una época en la que el cine de éste aparecía como una “rara avis”. Esta es una película dentro de una película. Narra el rodaje en Bolivia de un filme de época en torno al mito de Cristóbal Colón, un hombre obsesionado por el oro, cazador de esclavos y represor de indios. Es el año 2000 y la población boliviana, una de las más pobres de Suramérica se levantó contra las autoridades políticas y la multinacional norteamericana Bechtel que intentó subir de manera disparatada el precio del agua. El oro y el agua. El pasado y el presente. La lucha por la dignidad de un pueblo. De todo esto trata este quinto largometraje de Iciar Bollain, producido por Morena Films. Con un presupuesto de cinco millones de euros, en el filme también trabajan Karra Elejalde, que realiza una espléndida interpretación de Cristóbal Colón, Carlos Aduviri, en el papel de líder indígena,

Carlos Santos (el fraile Bartolomé de las Casas) y Raúl Arévalo (el fraile Juan Montesinos). Luis Tosar interpreta al productor del filme que va a rodar a Bolivia y Gael García Bernal el del director.Durante el rodaje en la selva del Chapare, Iciar Bollain aseguraba que no creía que esta película rompiera de manera radical con su anterior cinematografía. «No es una película intimista, pero sí creo que es de personajes. Hay una parte de época y otra del presente que narra acontecimientos políticos y sociales reales que sucedieron en Bolivia, pero al final es una historia en torno a dos personas, pero sin duda lo que más importa es que se trata de un gesto de solidaridad activa que, si bien no funciona a la perfección, supuso un trabajo loable hasta el punto de figurar entre les cogidas al Oscar para filmes en Lengua Extranjera. Desde el punto de vista social vale su precio en oro, y entre otras cosas porque supuso una patada en las partes de las multinacionales como la absolutamente infame Nesle, y tantas otras. Una historia que mostraría toda su virulencia con el último golpe de Estado bendecida por el Pentágono y por los llamados “evangelistas”, una plaga que el neoliberalismo ha conseguido sembrar en américa Latina siguiendo las enseñanzas de al a Dios por el Dinero que caracteriza al Opus Dei. Un montaje eclesial-capitalista cuya influencia en la judicatura y el ejército español es de primera magnitud.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.