La guerra contra el chavismo es de múltiples formas. Se suma una nueva.
Los políticos opositores reciben dinero, apoyo político-diplomático de Occidente. Las sanciones económicas golpean al pueblo. De Colombia se han realizado múltiples acciones desestabilizadoras. El exgrupo de Lima de Estados Unidos teatralizó un inicio de la caída de Nicolás Maduro.
Papa Francisco: «Pido que, entre todos, recuperemos esa Venezuela en la que todos sepan que caben… Y pido al Señor que ninguna intervención de afuera les impida caminar este camino de unidad nacional». Emol
Ahora en el estado de Apure la cúpula colombiana y detrás Estados Unidos crean una zona de combates armados de frontera.
Venezuela ha enviado soldados, algunos han muerto, y milicianos.
El enemigo son fuerzas irregulares narcoparamilitares que obedecen a empresarios y políticos colombianos.
Los narcoparamilitares tienen una zona de seguridad en su país donde una intervención de persecución venezolana real o inventada sería pretexto para una guerra.
Presidente Nicolás Maduro: “Quieren escalar un ataque poderoso a la unidad militar, una masacre contra nuestra Fuerza Armada ( que genere) una respuesta contundente y comience entonces una confrontación directa entre las fuerzas militares de Colombia y las fuerzas de Venezuela”.
El método es conocido se empleó en Afganistán armando y financiando a fanáticos religiosos contra el gobierno socialista que había pedido apoyo a los soviéticos.
En Siria hoy Occidente respalda fuerzas irregulares que han provocado enormes sufrimientos y pérdidas durante diez años.
Los paraestatales pueden hacer cualquier cosa sin comprometer oficialmente a sus empleadores.
Los invasores colombianos en Apure tienen años de experiencia asesinando y expulsando campesinos indígenas y afrocolombianos. No van a derrotar al gobierno y ejército venezolano ni apoderarse del Apure sino a crear una situación de desgaste, la posibilidad de un gobierno opositor, o de una intervención militar extranjera.
Sus patrones no buscan territorio para el negocio del tráfico su objetivo es recuperar el país de Bolívar y Chávez para el Imperio y los grandes empresarios.
El plan occidental en Venezuela choca con la política independiente de Rusia, Cuba, China, Irán, Bielorrusia y en Latinoamérica con los gobiernos de México, Argentina, Bolivia, Nicaragua.
El conflicto y sus proyecciones están convenientemente soterrados en los medios pero se podría prolongar de diferentes formas.
Jorge Arreaza, Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela advierte:
“Veamos: la FANB enfrenta y expulsa de Venezuela a grupos irregulares armados colombianos. Huyen a Colombia. Nadie los detiene o enfrenta allá. Bogotá manda tropas militares al sitio. No los persiguen, ni capturan. Movilizan tropas para protegerlos. ¡Alerta! Que nadie se engañe”.
Referencias
Aviación Militar Bolivariana
Por una civilización sostenible solidaria
Mientras no haya partidos y movimientos civilizatorios todos ellos como sus masas son conservadores.
Contacto romulo.pardo@gmail.com
Fuente: Mal publicados blogspot.com