Mate al Rey 104, en el formato «al costado de la cancha» —dupla Burgos-Riquelme— dedicamos este programa a hacer un análisis y sacar conclusiones de lo vivido este pasado 1º de Mayo. En efecto, la fractura existente entre las bases de trabajadores y la burocracia sindical, está marcada por dos hechos: 1.- Un incremento extremo en las condiciones de miseria de la mayoría trabajadora; 2.- La sumisión incondicional de la CUT y el conjunto de la burocracia sindical, a la política patronal del Gobierno.
Este hecho se reflejó con intensidad en los dos actos el pasado 1º de Mayo. Uno en el que la CUT agitó la bandera de las 40 horas, mote con el que pretende ocultar su apoyo a la feroz legislación de felxibilización laboral impulsada por el Gobierno. En este acto de sindicalismo amarillo, los burócratas sindicales se congratularon y felicitaron junto a las autoridades de Gobierno, proclamando la «victoria» que significaba haber impuesto la histórica agenda laboral de la Derecha.
Del otro lado, el acto clasista convocado por la CCTT, sirvió de punto de encuentro para los trabajadores de base, para el activismo y para las organizaciones de izquierda que abrazan una perspectiva revolucionaria. Por primera vez este acto supera en masividad a la CUT , lo que no impidió que la misma fuera reprimida desde su inicio, hecho que contrasta con la protección policial de que gozó el acto oficialista de la CUT.
Este escenario —en el que las clases sociales se ordenan una en contra de la otra— deja a las claras, la necesidad de los trabajadores y el activismo de izquierda de pronunciarse clara e inequívocamente en contra de la farsa eleccionaria constitucional. Votar nulo o abstenerse, son formas claras de manifestarse contra la institucionalización en marcha. Una forma de repudiar la «cocina» dentro del espacio electoral, pero que solo logrará potenciarse en la medida que trascienda a la calle, mediante reorganización, movilización y la construcción de una nueva dirección política de los trabajadores que se oriente hacia la revolución social.
Conducción: Gustavo Burgos Velásquez
Panelista: Marco Riquelme García (MPMR)
Dirección y edición: Sergio Rizenverg Cohen
Asistente de edición: Juan García Brun
