Editorial de The Socialist (número 1304), periódico semanal del Partido Socialista (CIT Inglaterra y Gales)
En 2024, el partido capitalista más exitoso del mundo sufrió una derrota histórica. El voto del Partido Conservador en las elecciones generales se desplomó, lo que dio lugar al peor resultado de sus 200 años de historia y al menor número de diputados de su historia.
Llevamos el titular “Los conservadores aplastados” y con él la tarea urgente e inmediata para el movimiento obrero: “Construir la oposición socialista”.
En sus primeros seis meses, el gobierno laborista de Keir Starmer ha demostrado una y otra vez que su prioridad y su propósito son servir a los intereses de la clase capitalista y defender el sistema capitalista basado en las ganancias. Mientras los empresarios se quejaban del aumento de la Seguridad Social y otros costos adicionales, su primer presupuesto fue acogido con agrado por el Fondo Monetario Internacional y el Financial Times, que lo consideraron favorable a los intereses del sistema en su conjunto.
El gobierno de Starmer fue elegido con los votos de apenas el 20% del electorado, la base de apoyo más baja de cualquier gobierno desde 1918. Elegido con poco entusiasmo, el liderazgo laborista es objeto de desconfianza, e incluso algunos miembros del Partido Laborista lo califican de «deshonesto».
Apenas dos semanas después de las elecciones, Starmer se enfrentó a su primera rebelión en el Parlamento cuando siete parlamentarios laboristas votaron en contra de mantener el límite de la prestación por dos hijos. Los siete son actualmente independientes, suspendidos del látigo laborista.
Coste de vida
Mientras celebramos el Año Nuevo y hacemos propósitos, el fantasma de la crisis del coste de la vida nos persigue. Los titulares de la prensa capitalista del 1 de enero hablaban de un aumento de las facturas de la energía. Se espera que, en promedio, los hogares se enfrenten a un aumento de la factura de 240 libras esterlinas.
Todo está subiendo: las tarifas de autobús y tren, las tarifas de telefonía móvil y banda ancha, los impuestos municipales, el agua, la comida, la licencia de televisión… La lista continúa. Con la llegada del frío invierno y la nieve, muchas familias de clase trabajadora se verán obligadas a elegir entre calefacción o comida. El recorte de la asignación de combustible de invierno para 11 millones de jubilados los pone en riesgo de congelarse este invierno. Los aumentos de precios están alimentando aún más una crisis de vivienda ya aguda. Casi uno de cada ocho inquilinos privados se enfrenta a la amenaza de desahucio este invierno.
No necesitamos el mensaje de Año Nuevo de Starmer para decirnos que las cosas van a empeorar: la clase trabajadora y los jóvenes lo están experimentando.
Pero no todo es malo para todos. Los banqueros van a recibir bonificaciones aún mayores, unas diez veces sus salarios, tras la eliminación del límite a las bonificaciones. Las empresas energéticas siguen obteniendo beneficios récord. Tan solo 20 empresas energéticas han obtenido unos asombrosos beneficios de 457.000 millones de libras desde el comienzo de la crisis de las facturas energéticas.
Sistema manipulado
Cada vez más, la clase trabajadora y los jóvenes llegan a la conclusión de que el sistema está manipulado en nuestra contra.
El recuerdo de la huelga de mayor nivel desde 1987 no se olvida, ni siquiera se olvida que la huelga puede triunfar. Desde agosto de 2021, los miembros de Unite the Union han conseguido 430 millones de libras en aumentos salariales, en 1.250 disputas, con más de 200.000 trabajadores que han tomado medidas, más del 80% de ellas con victorias. Y eso solo en un sindicato.
Otros sindicatos también han experimentado un aumento de su afiliación y se han formado nuevas capas de representantes y activistas. Hay una capa de trabajadores que está llegando a la conclusión de que ¡debemos luchar!
La presión de la clase trabajadora sobre los diputados y concejales laboristas va en aumento. Algunos temen no ser reelegidos y derraman lágrimas de cocodrilo. Otros podrían verse obligados a adoptar una postura en desacuerdo con la dirección de Starmer.
A nivel parlamentario, la elección de Jeremy Corbyn y otros cuatro independientes por Gaza muestra las posibilidades de cómo este gobierno se enfrentará a la oposición de su izquierda en futuras elecciones. A medida que el período de suspensión de los siete diputados se acerca a su fin, su destino en el Partido Laborista está en duda, en particular si defienden los intereses de la clase trabajadora.
A nivel local, varios concejales están abandonando el Partido Laborista para sentarse como independientes.
Independientes de Broxtowe
Los últimos en sumarse a ellos son 20 concejales de Broxtowe, cerca de Nottingham, que han dimitido del Partido Laborista y han acusado a Starmer de abandonar los valores laboristas. Resumiendo la situación actual, han sido denunciados por la exdiputada conservadora por Broxtowe Anna Soubry, que sostiene que la actual diputada laborista de Starmer «merece el apoyo de todos en Broxtowe».
Los Independientes de Broxtowe, que ahora son el grupo más grande del consejo, podrían usar su posición para encabezar la lucha contra la austeridad de Starmer, incluso continuando su política declarada de oponerse a los recortes en el presupuesto del consejo de este año.
El Partido Socialista acoge con satisfacción las medidas que han adoptado los concejales de Broxtowe y los anima a organizar una conferencia local e invitar a los sindicatos, a los activistas contra los recortes y a otros socialistas y activistas a debatir cómo construir el desafío más fuerte de la clase trabajadora en las próximas elecciones locales de mayo para el Consejo del Condado de Nottinghamshire. (El Consejo del Distrito de Broxtowe no tiene elecciones este año).
El Consejo de Sindicatos de Nottinghamshire, que cubre Broxtowe, podría invitar a los concejales a discutir con sus delegados qué tipo de representación política necesita la clase trabajadora.
Las elecciones de mayo serán la primera batalla electoral importante bajo el gobierno de Starmer. La Coalición Sindical y Socialista (TUSC), de la que forma parte el Partido Socialista, está organizando su conferencia para discutir los planes de una postura de la clase trabajadora en mayo, que tendrá lugar en línea el 2 de febrero.
TUSC es una bandera bajo la que pueden situarse socialistas y concejales independientes contrarios a los recortes, identificándose claramente como sindicalistas y socialistas, y diferenciándose de todo el espectro de «independientes» de diversos orígenes políticos. Por ejemplo, hay independientes en el ayuntamiento de Broxtowe que no forman parte del nuevo grupo y no son de izquierdas.
Luchar por la representación política de la clase trabajadora, por un partido para nuestra propia clase que defienda nuestros intereses, sigue siendo una prioridad al comenzar el nuevo año. Pero no tenemos que esperar a que se forme un nuevo partido para obtener logros para la clase trabajadora en este momento.
Los miembros del Partido Socialista seguirán apoyando a los trabajadores en sus acciones, ayudarán a organizar campañas locales, presionarán para que los ayuntamientos establezcan presupuestos basados en las necesidades y sin recortes, y lucharán por el programa socialista necesario para deshacerse del capitalismo.
Si estás de acuerdo en que el capitalismo está podrido y que las cosas deben cambiar, ¡estamos de acuerdo! Podemos cambiar y luchar por nuestros derechos ahora, no mañana. Únete a nosotros hoy.
