por Ariel Zúñiga y Felipe Pérez-Solari
“No podemos decir que no habrá rebrote, lo importante es estar preparados”[1]
Enrique Paris – 26 de Julio de 2020
Ministro de Salud de Chile
¿Ha respetado el gobierno de Sebastián Piñera la ley de la República, y las convenciones internacionales ratificadas por el congreso al combatir la pandemia del COVID-19? Esta es una pregunta que, planteada seriamente, debe tomar en consideración la Constitución[2], la ley 20.357 y los tratados internacionales vigentes.
Hasta ahora, la discusión ha rondado sobre si la estrategia gubernamental ha sido un “éxito” o un “fracaso”, no si se ha apegado estrictamente a la ley, la constitución y los tratados internacionales vigentes. Detenerse en la contradicción anteriormente mencionada es necesario para analizar los hechos relacionados a la aplicación de la estrategia tomada en Chile y sus consecuencias, así como si se ajusta a la ley la continuidad de la misma. No es posible olvidar, que el mismo gobierno que ha violado sistemáticamente los derechos constitucionales y humanos de los pueblos de Chile después del estallido social de octubre, se ve ahora obligado a asegurar el derecho a la vida y la salud de esos mismos pueblos. De esta manera, es de esperar que un gobierno violador de dichos derechos, actúe de la misma manera en un contexto de pandemia.