La organización destaca que más de la mitad de los 1.700 trabajadores que se desempeñan en las 112 tiendas de Starbucks en el país, estudian en alguna Universidad o Instituto Técnico Profesional.
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Por medio de un comunicado público, el Sindicato Starbucks Coffee Chile expresó su rotundo rechazo al proyecto de ley que busca normar las relaciones laborales de estudiantes entre 18 y 24 años. Esto, porque las indicaciones allí presentadas, con el pretexto de facilitar el ingreso de los jóvenes al mundo laboral, esconderían una importante precarización de los derechos laborales.
El proyecto, que originalmente fuera presentado en el 2013 y que ahora es retomado con urgencia simple, buscaría entregar las herramientas para que trabajadores y empleadores puedan acordar horarios flexibles de trabajo, con jornadas que puedan dividirse incluso dentro de un mismo día. Además, permitiría que los jóvenes que perciben remuneración no sean contabilizados como parte del ingreso familiar, con el objetivo de no perjudicar al estudiante en instancias de postulación a beneficios del Estado.
Sin embargo, los trabajadores de Starbucks denunciaron que el proyecto “genera total inestabilidad laboral mediante el uso indiscriminado de contratos a plazo fijo”, lo que, además, imposibilitaría virtualmente la organización sindical debido a la tendencia de no renovar contrato a los sindicalizados, según indicaron en el comunicado.
También manifestaron su malestar por la eliminación al derecho a indemnización por años de servicio u otra que corresponda, en caso de que la desvinculación sea por aplicación del artículo 161.
Entre otros argumentos, el sindicato de Starbucks destacó que el proyecto aumentará las jornadas laborales a 12 horas, quitará los descansos dominicales impidiendo a los trabajadores ejercer sus derechos relativos a la Ley N°20.823, y facultará al empleador para “poner término a un contrato por vencimiento de plazo durante el uso de licencias médicas, incluidas el pre y post natal”.
Finalmente, los trabajadores expresaron su preocupación por que este proyecto de pie a los empresarios para sustituir la mano de obra estable por esta nueva modalidad más flexible y precaria, ya que no se especifica una regulación respecto a la cuota para este tipo de contrataciones.
El presidente del sindicato, Andrés Giordano señaló que “si el objetivo real es beneficiar a aquellos estudiantes que además trabajan, no vemos ninguna excusa para flexibilizar y precarizar las condiciones de empleo a las que pueden optar. Al final del día lo que parece más evidente es que esto busca bajar los índices de informalidad laboral, pero manteniendo las mismas condiciones precarias que la inexistencia de un contrato emplea, es decir, es una legalización de la precariedad”.
