Con el bloqueo de la ruta de acceso a San Pedro de Atacama, turística comuna ubicada en la Región de Antofagasta, el Consejo de Pueblos Atacameños y las 18 comunidades que lo integran manifestaron su molestia ante el acuerdo que concretó la Corporación de Fomento a la Producción (Corfo) y SQM Salar S.A., pues aseguran que además de no haberlos considerado en la respectiva consulta aún existen pendientes temas ambientales de gran importancia.

“Este es nuestro territorio, todo el área de Atacama La Grande y la cuenca del Salar de Atacama está dentro de las demandas territoriales que el gobierno se comprometió en solucionarlo desde cuando se promulgó la Ley Indígena, además no estamos de acuerdo en
que hayan llegado a un convenio sabiendo de sus malas prácticas”, argumentó la presidenta del Consejo de Pueblos Atacameños, Ana Ramos.

Asimismo, recalcó que la cuenca del salar se está secando y que el Comité de Minería no Metálica que se creó para hacer políticas sobre el litio les prometió desarrollar un estudio hidrogeológico para tener claridad y “saber el estado de salud del Salar de Atacama y resulta que ni siquiera esperaron tener ese informe y firmaron el convenio”.

Ramos enfatizó que no reconocen el proceso de socialización que hizo Corfo, ya que no se dirigió al Consejo de Pueblos, “sino que dentro de su convenio incluyeron a las comunidades, pero no hubo consulta”, agregando que el vicepresidente de la entidad, Eduardo Bitrán, “hizo reuniones con algunas puntuales y lo inscribió en el convenio, pero eso no goza de nuestra aprobación”.

Manifestación

Pasadas las 15 horas, miembros de las 18 comunidades comenzaron a llegar hasta el acceso norte del poblado e iniciaron su marcha hasta el ingreso al Valle de Marte, donde
bloquearon la ruta internacional CH-23 por cerca de tres horas.

A pesar de la presencia de Carabineros y la constante insistencia de terminar con la manifestación por el atochamiento vehicular que se generó, los cerca de 200 atacameños que se reunieron argumentaron la necesidad de insistir en la protección de su tierra y el
agua, fundamental para conservar y mantener la cultura atacameña.

Durante la protesta, los presidentes de las comunidades de Peine y Larache anunciaron que comenzaran con una huelga de hambre hasta que las autoridades den una respuesta efectiva en cuanto a bajar el convenio que implica explotar la cuenca hasta el 2030 y que le permite extraer 180.000 toneladas adicionales.

Cerca de las 19.30 horas los comuneros ingresaron al poblado y se dirigieron hasta la plaza, donde siguieron con la manifestación, exigiendo el pronunciamiento del Gobierno.