CEAS Sahara, Coordinadora Estatal de Asociaciones solidarias con el Sáhara, junto con otras organizaciones sindicales -nacionales e internacionales- y organizaciones de la sociedad civil, condenamos la masacre que está cometiendo el Gobierno del Estado de Israel y denunciamos el incumplimiento de las Resoluciones de Naciones Unidas sobre Palestina. De la misma manera que denunciamos, desde hace muchos años, la ocupación militar del Territorio del Sahara Occidental por el Gobierno del Reino de Marruecos. Pedimos a la Comunidad internacional, y en especial a la Unión Europea, a que asuma sus responsabilidades y ejerza toda su influencia sobre el Estado de Israel para frenar la barbarie en Palestina y poner fin a la ocupación ilegal del territorio en Gaza y Cisjordania, incluida Jerusalén Este.

Lejos de mejorar la situación, las violaciones sistemáticas de los derechos humanos y la violencia extrema se sigue incrementando hasta llegar a una jornada negra como la que se ha vivido en la Franja de Gaza.

El anuncio, el pasado diciembre, del presidente de Trump relativo al traslado de la embajada de Estados Unidos ha supuesto un nuevo factor de amenaza clara para la paz y la estabilidad en la región, dejando al descubierto de nuevo las estrategias de negación de la existencia de Palestina y la ausencia de respeto a los consensos internacionales.

Participamos con el resto de las organizaciones en la exigencia de la intervención del MAEC, junto a los gobiernos europeos y las instituciones de la UE, para tomar las medidas necesarias para obligar al Estado de Israel a cumplir la legalidad internacional y las resoluciones de la ONU relativas a Palestina.

Al igual que nos posicionamos en el caso de la ocupación militar marroquí del Sáhara Occidental, queremos, también ahora, exigir al gobierno español que intervenga junto a los Gobiernos Europeos y las Instituciones de la UE, para que se adopten medidas urgentes para obligar al Estado de Israel a que cumpla con la legalidad internacional y las Resoluciones de la ONU respecto a Palestina, así como el respeto de los Derechos Humanos de los pueblos palestino y saharaui, con el objetivo de que acabe la ocupación y se logre el retorno de las y los refugiados en los dos Países.

Hoy es Palestina, mañana puede ser la población indefensa en el Sahara Occidental ocupado por la fuerza por el ejército marroquí.