FENPRUSS. PUBLICADO POR YAMIL ASENIE BAHAMONDES
Como Fenpruss manifestamos un rotundo rechazo a la propuesta de la candidata a la presidencia de la Democracia Cristiana, senadora Carolina Goic, de retomar las concesiones hospitalarias como modelo de construcción, ya que, esta vía de construcción y administración de hospitales ha sido un fracaso en todos los países en que se ha implementado, cuestión que ya fue advertida por Fenpruss durante la administración de Sebastián Piñera.
Ejemplo claro de lo descrito anteriormente son los Hospitales El Carmen, de Maipú, y Eloísa Díaz, de la Florida, los cuales han afectado negativamente la salud pública estatal aumentando sus costos, lo que no necesariamente se ha reflejado en un mejor servicio para las y los usuarios.
Según los datos que manejamos, el costo de inversión de ambos hospitales fue de US$313 millones. Sin embargo, el Estado cancelará US$426 millones, un 27% más de lo que cuestan los hospitales construidos con fondos sectoriales. Esto, sin contar los US$ 173 millones extras que debe desembolsar el Estado por concepto de operaciones, situación que se da solo en hospitales concesionados.
Otro elemento importante a considerar es la supuesta rapidez en su construcción, situación despejada rotundamente, ya que, estos mismos hospitales demoraron más, o lo mismo, que otros establecimientos edificados en la misma época, a través del ministerio de salud. “En Fenpruss estamos seguros que el cemento se seca en los mismos tiempos, ya sea a través de la concesión o de construcción con fondos sectoriales”.
Dicho lo anterior, no se trata de demonizar la vía de las concesiones, como lo plantea la candidata, pero sí dejar en claro que la construcción hospitalaria con este sistema puede duplicar el costo y demorar mucho más que si el Estado se responsabiliza de las obras y sus gastos.
A quienes hemos seguido de cerca la construcción de establecimientos hospitalarios no nos sorprenden las declaraciones hechas por la senadora Goic, toda vez que es conocida la postura de los sectores conservadores de la DC y en especial la postura del ministro Undurraga quien ha tratado, hasta ahora en vano, de resucitar este sistema que es aplaudido por el sector empresarial ya que les asegura la generación de altos ingresos.
Las chilenas y los chilenos merecemos tener casa propia, pero esto no puede ser a costa de estar toda una vida pagando, como se desprende de las palabras de la candidata del centro político. Y menos, a costos usureros cuando tenemos un Estado que tiene el reconocimiento internacional que le permite endeudarse construyendo estos hospitales a un menor costo.
Invitamos a la senadora Goic a informarse con mejores datos acerca de los atrasos en las construcciones que ha llevado a cabo su propio gobierno, donde encontrará datos interesantes como el aumento inexplicable del valor del m2, las revisiones constantes de Contraloría y, en algunos casos, la poca prolijidad de algunas autoridades locales. La meta propuesta por el gobierno no era ambiciosa senadora, lo que ocurre es que colisionó con los ambiciosos de siempre que frente al dolor y la enfermedad tratan de sacar un buen negocio.
Hubiésemos esperado que una candidata del mundo social cristiano se abriera a la posibilidad del retorno de la Sociedad Constructora de Establecimientos Hospitalarios (SCEH), quien por cerca de 40 años tuvo en sus manos la responsabilidad de construirnos establecimientos de alta calidad y que aún se mantienen en pie. Sabemos que lo anterior es compartido por la actual Ministra de Salud, quien hace más de un año ya planteó esta idea, pero que el establishment hizo oídos sordos, como es su costumbre, cuando los negocios de los grandes están en entredicho.
