· Concierto es el primero de un ciclo denominado “Conciertos de Culto” que La Realidad Producciones realizará en la zona.
Corría el año 1978 y en la Universidad Católica de Valparaíso el proceso de reorganización de las fuerzas políticas contrarias a la dictadura tomaba forma. En el mismo edificio de la Casa Central, por la calle Yungay, se encontraba el Café Santa Julia. Allí se sucedían las conversaciones conspirativas de los estudiantes al son de la especialidad de la casa: la malta con huevo. Allí, surgiría el Taller Génesis, con sus ramas de fotografía, literatura, teatro y música; un espacio político unitario y contra cultural que se constituiría en un referente estudiantil, en una universidad amordazada por la Marina y el Opus Dei.
A esa universidad y en ese tiempo llegaría a cantar un joven e influyente trovador venido de Santiago, Eduardo Peralta; quien fuera invitado por el centro de alumnos de Geografía. Y a esa universidad y en ese tiempo, en las actividades del Taller Génesis, otro joven trovador, estudiante de Arquitectura de dicha casa de estudios, sorprendería a sus compañeros con la producción artesanal de un disco completo, cuyo soporte fueron unos 300 cassettes que circularon profusamente y que hoy constituyen un objeto de culto.
Pero no era sólo la universidad la que intentaba sacudirse de la bota militar; la ciudad se fue poblando de peñas, en sedes comunitarias o parroquias de cerro, en locales comerciales que abrieron valientemente sus puertas a estos actos de resistencia, o –incluso- en recintos con inmunidad diplomática. La Peña del Chileno-Francés, El Brasero, La Calaguala, El Boliche La Obra, La Puerta del Sol, acogían semana a semana a personas que buscaban un espacio de encuentro con sus pares y un momento de relajo en medio de la oscuridad de esos días.
Eduardo Peralta frecuentó la mayoría de estas peñas, y aunque su oficio de trovador consolidado lo llevó a recorrer 130 ciudades de Chile y 30 países de cuatro continentes, siempre volvió a Valparaíso.
Daniel Campos.
Por su parte, Daniel Campos dejó la UCV en 1980 y al año siguiente partió a Barcelona, España a estudiar Música. Por mucho tiempo nada se supo de él. Y tan silencioso como partió, regresó. Desde 1986 ha ejercido como profesor universitario en diversas universidades de Chile. Radicado en Santiago, ha vuelto al puerto de Valparaíso un par de veces a compartir su música, la de ayer y la de hoy.
Pues bien, Daniel vuelve a dar un concierto el próximo sábado 17 de junio, a las 20.00 horas en la Casa de la Cultura de Valparaíso, compartiendo por primera vez en esta ciudad escenario con Eduardo, quien ya estuvo tocando en este lugar cuando aún era La Piedra Feliz.
No cabe duda que, junto a Peralta y Campos, ese sábado se reunirá una generación que supo apreciar la calidad de estos trovadores en medio de la vorágine dictatorial y que estará siempre agradecida del bálsamo que sus creaciones significaron en aquel tiempo.
