Jon Queally
A l’encontre, 1-5-2020
http://alencontre.org/ameriques/
Traducción de Ruben Navarro – Correspondencia de Prensa
Cornel West, profesor de filosofía de la Universidad de Harvard, hizo declaraciones a CNN en la noche del viernes (29 de mayo) en medio de las protestas nacionales contra el asesinato de George Floyd, perpetrado por la policía en Minneapolis, Minnesota. Hizo una brillante acusación no sólo contra la supremacía blanca, el neofascismo del presidente Donald Trump y un sistema de justicia penal que maltrata a los pobres y a la gente de color, sino también contra la depravación profunda del sistema capitalista neoliberal del siglo XXI en los Estados Unidos, un sistema que abarca también a los dos principales partidos políticos.
Mientras las protestas se desarrollaban en Minneapolis, delante de la Casa Blanca de Trump y en otras ciudades estadounidenses – incluidas Atlanta, Chicago, Nueva York, Cleveland y Oakland – Cornel West declaró a Anderson Cooper de la CNN: «Creo que lo que estamos viendo en los Estados Unidos es una experiencia social fallida».
«Lo que quiero decir con esto», explicó Cornel West, «es que la historia de los negros durante más de 200 años ha sido la del fracaso de los Estados Unidos. Su economía capitalista no ha logrado producir ni ofrecer adecuadamente lo que la gente necesita para vivir una vida decente. El Estado-nación, su sistema de justicia penal y su sistema jurídico son incapaces de garantizar la protección de los derechos y las libertades. Y ahora, nuestra cultura, por supuesto, está tan manejada por el mercado – todo está en venta, todo el mundo está en venta – que no puede siquiera darle al alma aquellos alimentos que necesita para darle un significado y un objetivo.»
Cornel West explicó que la bronca por el asesinato de George Floyd por parte de la policía -uno de ellos (de los cuatro policías), el oficial Derek Chauvin, fue arrestado el viernes (29 de mayo) y acusado de asesinato en tercer grado y de homicidio involuntario- desencadenó una «tormenta perfecta» causada por los múltiples fracasos y por las desigualdades que existen bajo el sistema imperial estadounidense, que personas como Martin Luther King Jr. y otros vienen denunciando desde mediados del siglo pasado.
«En las fotos de Atlanta», dijo West, «se podía ver al hermano Martin allí mismo, en Atlanta, diciendo: «Hablé de militarismo. Hablé de la pobreza. Hablé del materialismo. Hablé del racismo bajo todas sus formas. Hablé de la xenofobia». Y lo que vemos hoy en los Estados Unidos de América es sólo la consecuencia de todo eso. Cosechas lo que siembras. Y en este momento – es algo tan claro – vemos al hermano George Floyd linchado, sin que quepa la menor duda sobre ese acto atroz. Nadie lo puede negar».
Cuando estallaron las manifestaciones de solidaridad más allá de Minneapolis el viernes por la noche, indignadas por el asesinato de Floyd -y el asesinato por la policía de otras víctimas negras, morenas y marginadas- West dijo: «Agradezco a Dios que haya gente en las calles. ¿Puedes imaginarte este tipo de linchamiento y que la gente se quede indiferente? ¿Te imaginas que a la gente no le importe? ¿Que la gente sea insensible?»
Cornel West calificó al presidente Donald Trump como el «gánster neofascista de la Casa Blanca» (Trump twiteó el domingo 31 de mayo llamando a los manifestantes «antifascistas/terroristas», lo que significa: «que los maten»), pero dijo que el fracaso de la nación -que permite una desigualdad endémica y una cultura de la codicia y del consumo que pisotea los derechos y la dignidad de los pobres y de las minorías una década tras otra- empezó mucho antes que el mandato del actual presidente.
«El sistema no puede reformarse a sí mismo», dijo Cornel West. «Subrayó la necesidad de una dinámica en la que la representación de la identidad sirva para defender la igualdad de clases, la prosperidad compartida y una democracia funcional que exprese verdaderamente la voluntad popular y satisfaga las necesidades materiales de los trabajadores y de los pobres».
«Hemos tratado de colocar en alto a algunas figuras negras», dijo. «Demasiado a menudo, nuestros políticos negros, la clase profesional, la clase media, se sienten demasiado cómodos con la economía capitalista, demasiado cómodos con un Estado nación militarizado, demasiado cómodos con la cultura de mercado, con las personalidades famosas, el estatus, el poder, la celebridad, todas esas cosas superficiales que significan tanto para tantos de nuestros conciudadanos.»
«Hay un ala neoliberal del Partido Demócrata que tiene ahora el control tras el fracaso del hermano Bernie (Sanders) y en realidad no saben qué hacer», añadió West, «porque todo lo que quieren es mostrar más caras negras». Pero a menudo esas caras negras también pierden su legitimidad, porque no nos olvidemos que el movimiento Black Lives Matter nació bajo un presidente negro, un fiscal general negro y un servicio de seguridad nacional negro. Y no pudieron cumplir sus promesas. Así que cuando hablamos de las masas de gente negra – los pobres y los trabajadores negros, morenos, rojos, amarillos, de cualquier color que sean – hablamos de los que se sienten ignorados, impotentes, desamparados, desesperados, y entonces explota la rebelión.»
Según Cornel West, la nación debe ahora elegir entre una «revolución no violenta» o la continuidad de los fracasos del status quo ante. «Y por revolución, me refiero a compartir democráticamente el poder, los recursos, la riqueza y el respeto», explicó. «Si no conseguimos esa manera de compartir, las explosiones van a ser más violentas todavía.»
Los peligros inherentes a Trump son reales, insiste West, pero agrega que una de las ventajas del presidente es que le dice al mundo exactamente quién es. Por otra parte, los fracasos más amplios del sistema bajo la economía capitalista neoliberal rara vez se exponen o revelan por lo que son realmente.
«La supremacía blanca va a durar mucho, mucho, mucho tiempo, y no debe sorprendernos si esto vuelve a suceder», dijo Cornel West.
«Pero tenemos que luchar», concluyó. «Incluso en un momento en el que somos testigos de una experiencia social fallida, debemos luchar. Debemos construir una coalición antifascista contra lo que pasa en la Casa Blanca y en el Partido Republicano. Y tenemos que decir la verdad sobre la actitud vergonzosa y cobarde del ala neoliberal del Partido Demócrata. Y debemos criticarnos a nosotros mismos para mantener en alto los estándares morales y espirituales de Martin Luther King Jr, de Fanny Lou Hammer (1917-1977, activista de los derechos civiles, oradora popular de gran impacto) y de Ella Baker (1903-1986, una de las grandes figuras del movimiento de derechos civiles). Y ves ese trabajo en el alma de la familia del hermano George Floyd».