por Pedro Matta Lemoine
Victor, a quien no tengo el agrado de conocer pero que cuenta con mi completo apoyo y solidaridad, ha sido elegido como blanco por el gobierno de Piñera, por su Ministra de Educación, por el Intendente de Santiago, y por parte importante de la casta política gobernante. Su culpa es haber llamado al boicot a la PSU y, contra todos los cálculos del gobierno, haber tenido un rotundo éxito.
Victor es nieto de Alfonso Chanfreau, dirigente estudiantil universitario que desapareció en Colonia Dignidad en 1974, después de haber pasado por los centros de tortura de Londres 38 y de Villa Grimaldi. Uno de sus principales asesinos y torturadores fue Ricardo Lawrence Mires, coronel de Carabineros en retiro. Lawrence ha sido condenado por los tribunales de Justicia, con sentencia ejecutoriada, no solo en el caso de Alfonso Chanfreau, sino que en el de decenas de otras víctimas de torturas, asesinatos, y desapariciones forzadas. Lawrence tiene a sus espaldas un largo y tenebroso recorrido por distintos centros de tortura de esa época: Rocas de Santo Domingo y Tejas Verdes, Rinconada de Maipú, Londres 38, Venda Sexy (jefe de cuartel), Villa Grimaldi, y la casa de exterminio de Simón Bolívar 8630 en la Comuna de La Reina.
Lawrence no solo torturó y asesinó a su abuelo, sino que no contento con eso también torturó y abusó de su abuela quien felizmente pudo sobrevivir.
Ricardo Lawrence Mires hace cinco años que se encuentra prófugo. «La institucionalidad» no ha sido capaz o no ha querido capturarlo. Es el agente de la DINA prófugo con el mayor prontuario e historial. Es más, Lawrence tiene el grado de coronel en retiro del Cuerpo de Carabineros, la misma institución que durante los últimos tres meses ha torturado, muerto, y mutilado a cientos de jóvenes como Victor. Una institución que, en base a su historia y su registro, es perfectamente dable pensar que ha estado tras el apoyo logístico para que un ex alto oficial y miembro de ella siga evadiendo la justicia. Lawrence es la personificación de la impunidad, impunidad proporcionada por ESTA institucionalidad.
En este contexto, es posible esperar que Víctor Chanfreau sienta respeto y apego por ESTA institucionalidad? Yo creo que no, y me hago partícipe de su sentimiento.