IMPERIALISMO ATACA A NICARAGUA
Jorge Aliaga Cacho*
Más muertos y heridos, se produjeron el fin de semana en Nicaragua producto de la violencia política diseñada por los Estados Unidos para desestabilizar a Daniel Ortega quien fuera elegido, democráticamente, con el 72% de los votos emitidos en los últimos comicios electorales en dicho país. Las últimas víctimas han sido cuatro personas, entre ellas, un empleado del gobierno de Nicaragua, de nombre Jorge Gastón, quien murió después de haber recibido un impacto de bala por parte de las bandas criminales que azotan al país con el apoyo del gobierno de Donald Trump que aplica su política imperialista en la región. Se reporta que a la fecha el número de victimas alcanzan a 84 muertos y 860 heridos. Los disturbios comenzaron con una protesta en contra de una reforma que se iba a introducir en el sistema de seguridad social, pero que el gobierno respondió con la anulación de la misma. Sin embargo, los enemigos de la democracia, y amantes de la violencia desestabilizadora, es decir, los sectores derechistas del país, reciben apoyo logístico del gobierno de Trump para acabar con un proceso revolucionario que viene desencandenando a Nicaragua de las cadenas políticas y económicas que impone el imperialismo norteamericano.
Daniel Ortega, el legendario guerrillero sandinista, llegó al poder, por primera vez, en 1979, luego del triunfo de la revolución sandinista, este período culminó en 1990. Luego Ortega vuelve a la presidencia sin abandonar su mensaje de izquierda el mismo que fue abrazado por el pueblo nicaragüense que le dio su apoyo en las urnas electorales.
Esa es la preocupación de los Estados Unidos y la poderosa industria privada que opera en Nicaragua.
La anti-patria conserva la esperanza de regresar al pasado que viera su conducta de explotación y desconocimiento de los derechos laborales y sociales de los ciudadanos de la patria de Sandino.
El imperialismo y la derecha nicaragüense temen que la revolución se consolide y teme, aún más, ver a Nicaragua como una pieza fuerte en el ajedrez geopolítico de la región. Naciones latinoamericanas con gobiernos estables y con políticas independientes, que no siguen las formulas imperialistas, son atacadas por las fuerzas retrógradas que alguna vez concentraron el poder total para explotar y reprimir a nuestros pueblos.
Donald Trump no permite el éxito de gobiernos que salgan de su círculo de dominación. Por ello atacan a Nicaragua, pues su gobierno ha sabido mantener la paz y la concordia, dentro de un proceso de mejoramiento socio-económico para todo el país. Esta es la marcada diferencia con otros países centroamericanos que sufren el yugo imperialista y por ende la explotación, miseria y desprotección.
A comienzos de este año, el prestigioso periódico británico, «The Guardian» ubicó a Nicaragua entre los países de su preferencia como destino turístico. Desde luego esto es mala noticia para Donald Trump y los enemigos de Nicaragua. La nota en mención afirma que Nicaragua es oficialmente el país más seguro de la región y que durante mucho tiempo ha sido un lugar frecuentado por los surfistas. El número de visitantes está aumentando, dice la nota, (1.5 millones en 2016, con un 28% de crecimiento previsto para 2017), atraídos por sus lagos y volcanes, (hay 19 conos activos para escalar), ciudades coloniales y costas del Pacífico y el Caribe. «The Guardian» también menciona que la aerolínea Iberia realizará a partir de Octubre vuelos directos de Madrid a Managua. Esto mejorará aún más el recorrido por el país. A esto se suma los beneficios de la nueva carretera Costanera del Pacífico que unirá algunas de las más bellas playas de la costa del Pacífico. Esto,desde luego, es mala noticia para Donald Trump y su política que busca el sometimiento de los países de Nuestra América. Por ello, países como Nicaragua, con potencial de desarrollo y consolidación, sufren el embate por parte de vándalos, hordas criminales, que con el uso de pertrechos de guerra vienen asesinando a hombres y mujeres de la tierra de Ruben Darío y Augusto César Sandino. Los latinoamericanos debemos denunciar estos ataques organizados por los Estados Unidos con la gravedad de usar migrantes de otras nacionalidades.
Donald Tump es el responsable y su gobierno el autor ‘intelectual’ de la formación de Maras y Guarimbas para realizar acciones terroristas en Nicaragua como lo hizo hace poco en Venezuela.
*Escritor, poeta, periodista, dispara con la pluma: ‘La ofensiva imperialista en Nicaragua, no pasará’. Elevemos nuestra voz de protesta. ¡Sandino Vive!.