RICARDO KLAPP SANTA CRUZ
El 18 de octubre de 2019, el pueblo se expresó en el anhelo de transformar la sociedad. Hasta que la justicia y la igualdad se hagan costumbre. El Allendismo es un sentimiento de esperanza del movimiento popular y del mundo social, con un propósito transformador de la acumulación de fuerzas sociales y políticas. Ideas que son actualmente ignoradas por sectores diligénciales de la centro izquierda neoliberal.
Salvador Allende, cuyo patrimonio histórico, político y moral está vigente. Es fuente de inspiración para luchar por transformaciones culturales y por una democracia económica y social. Luchó con intransigencia por la unidad del pueblo, la que permitió el triunfo y el Gobierno de la Unidad Popular. Esa unidad le entregó identidad y esperanzas a los sectores populares y creó las condiciones para el desarrollo social.
Para el Presidente Allende, la democracia plena, no es realizable bajo el capitalismo. El socialismo chileno, dice Allende, es marxista y humanista, la “vía chilena hacia el socialismo”, o “el socialismo con empanadas y vino tinto”, “es expresión de la voluntad del pueblo, para satisfacer sus necesidades materiales y espirituales, es el camino elegido para luchar por la igualdad y la justicia, lo que permitiría asegurar a todos por igual derechos, seguridades, libertades y esperanzas”.
Los elementos que sostienen la crítica al sistema capitalista del compañero Allende, hoy persisten y se amplían, así también su propuesta, entre muchas otras, acerca de la democracia económica y justicia social, de la igualdad, la libertad para un proyecto emancipatorio y transformador.
Con no recordar, cuando Salvador Allende se impuso en el ranking de «Grandes Chilenos», que organizó Televisión Nacional (TVN), – con el 38,81 por ciento de las preferencias. Más abajo quedaron otros nueve importantes personajes históricos del país: Arturo Prat, que logró un 38,44; Alberto Hurtado, con 7,97; Víctor Jara 3,67; Manuel Rodríguez 2,43; José Miguel Carrera, 21,15; Lautaro, 1,97; Gabriela Mistral, 1,89; Pablo Neruda, 1,37; y Violeta Parra, 1,29%.
Salvador Allende, nació el 26 de junio de 1908 y murió el 11 de septiembre de 1973 en una gesta heroica enfrentando a los golpistas. Junto al pueblo se desarrolló con entereza como líder popular. Fue Diputado, Ministro de Salud, Senador, Presidente del Senado y elegido Presidente de La Republica en 1970.
Como jefe de Estado, en su programa puso énfasis en la redención social y económica del pueblo. Sus ideas y
consecuencia, no cayeron en el olvido y dieron origen a su legado emancipador.
El ideario Allendista, está presente y es futuro. Está al interior de los partidos y organizaciones de izquierda y
movimientos sociales. Los principios están domiciliados en la gente común, en el pueblo. Están mayoritariamente ausentes en los poderes estatales.
Está presente en los territorios, en las marchas reivindicativas y en la protesta social. Allí es, donde nuestro compañero Allende, siempre nos acompaña.
El sueño del socialismo democrático y libertario de Salvador Allende sigue vigente. Estamos para continuar su legado, actualizado a la nueva realidad social.
Como es la tradición en Puente Alto. El sábado 26 de junio, el Centro Cultural de Derechos Humanos Salvador
Allende, a las 11:30 horas, en el Memorial por la Justicia y la Dignidad, junto a organizaciones sociales y de derechos humanos, realizará un acto de homenaje con los cuidados sanitarios, a los “113 años del Natalicio del Presidente Allende”, en forma presencial, como se lo merece el líder del pueblo y del venceremos, que
ofrendo su vida por la justicia y la dignidad.