Xataka Móvil
- La guerra entre Estados Unidos y China se ha recrudecido desde el lanzamiento del Huawei Mate 60 Pro y sus componentes ‘prohibidos’
- Ahora, ambos países están en un intercambio de golpes con el objetivo de frenar la industria de semiconductores
- ALEJANDRO ALCOLEA @Lherot
- A estas alturas, es innegable que China y Estados Unidos están inmersos en una guerra comercial, pero también tecnológica. De hecho, los dos conflictos están íntimamente relacionados y China ha tensado la cuerda estas últimas semanas vetando el acceso a Estados Unidos, y a sus aliados, a ciertos materiales imprescindibles para la construcción de semiconductores.
- Estados Unidos quería estrangular a China vetando el acceso a la tecnología necesaria para construir chips de última generación y China ha devuelto el golpe: ni un gramo de galio y germanio vendido a Estados Unidos y sus socios desde el 1 de agosto. Ahora bien, saben que occidente devolverá el golpe y están acumulando materias primas para mantener viva su industria.
- China hace acopio de materias primas taiwanesas
- El conflicto entre los dos países ha tomado un color interesante desde que Huawei lanzara el Mate 60 Pro. En su hoja de especificaciones, la compañía china detalló todos los componentes excepto uno: el procesador. En cuanto los usuarios y medios lo tuvieron entre manos, se descubrió que el SoC era el Kirin 9000S.
- Nadie sabía de dónde salía el procesador, pero poco después se supo que se trataba de un chip creado por SMIC -Semiconductor Manufacturing International Corp- en una litografía de 7 nanómetros y con conectividad 5G. Supuestamente, no era posible debido a los esfuerzos de Estados Unidos por vetar el acceso a la maquinaria necesaria para crear esos chips, pero además se encontraron módulos de RAM y NAND de SK Hynix que no deberían estar en el terminal.
- De hecho, el gobierno estadounidense está investigando cómo se ha podido fabricar ese SoC y, seguramente, cuando terminen el examen habrá nuevas sanciones para China. Eso sí, no es el único motivo por el que habrá más sanciones.
- Y es que, como recogen nuestros compañeros de Xataka, tras la decisión china de no vender galio y germanio a los países aliados de Estados Unidos, el gigante asiático se huele la respuesta estadounidense al vetar el acceso a otros materiales necesarios para desarrollar su industria tecnológica y está comprando todo lo posible a Taiwán.
- Es curioso porque Taiwán es aliada de Estados Unidos, pero teniendo en cuenta la altísima demanda por parte de China, está interesada en seguir vendiendo materiales a SMIC, al menos hasta que Estados Unidos lo prohíba. Por eso, y según el medio chino UDN, SMIC y otras empresas chinas están realizando pedidos descomunales.
- De momento, han pedido de golpe los materiales necesarios como para mantener su industria de semiconductores durante los dos próximos años debido a que imaginan que Estados Unidos pronto lanzará un contraataque.
- Veremos lo que duran las reservas de China, ya que hace unos días publicaron la hoja de ruta de desarrollo tecnológico que quieren empezar a poner en marcha a corto plazo y donde destaca la fabricación de la maquinaria necesaria para crear chips a gran escala tanto de 7 como de 5 y 3 nanómetros.
- Lo que está claro es que el culebrón está lejos de acabar y este intercambio de golpes puede salir carísimo a todas las economías implicadas de un modo u otro.