Rómulo Pardo Silva
La política es la actividad social dirigida a proponer, acordar y solucionar problemas.
En estos momentos mundialmente elude el principal.
Los políticos de la oligarquía global y sus medios se refieren a situaciones a veces muy graves pero dentro del marco del sistema.
Todas las dificultades se abordan desde la continuidad del poder empresarial y su meta productivista consumista por lucro.
En la actualidad el problema vital es la supervivencia humana y de todas las formas de vida en el planeta.
El secretario general de las Naciones Unidas ha dicho que ya no se vive un periodo de calentamiento global sino el comienzo de una era de ebullición global.
La información es dirigida a la destrucción del clima, al calor abrumador, pero el poder fáctico del sistema no puede hacer centro en la sostenibilidad, el de crecimiento, la planificación social necesarios.
Se oculta que el daño humano es una crisis múltiple producida por los grandes patrones. Falta agua para beber y producir alimentos, desaparecen especies, ocurren inundaciones, temporales, sequías en cualquier lugar y momento, se deshielan los polos, se agotan recursos no renovables, se reducen las selvas…
Han creado situaciones relacionadas graves, migraciones, peligro nuclear, guerra de Ucrania, peligro de guerra en Níger, pobreza, hambre, una inteligencia artificial que puede destruir empleos…
Todas las soluciones tienen que abordarse desde una política de sobrevivencia.
Ninguna medida parcial debe afectar la sostenibilidad, cada una debe ser coherente con ese eje central.
No se dice el qué hacer porque es otro modelo.
El actual es insostenible en el tiempo. Solo pueden prolongarlo.
