El hallazgo de huesos humanos bajo el suelo de un sótano de la nunciatura (la embajada) de la Santa Sede en Roma, ratificado ya que son de mujer, disparó la hipótesis de que se pueda tratar de las niñas Emanuela Orlandi o de Mirella Gregori, dos chicas que desaparecieron de manera misteriosa en 1983 en el Vaticano.
«Durante los trabajos de restauración de un espacio anexo a la Nunciatura Apostólica en Italia [la embajada del Vaticano] se hallaron fragmentos de huesos humanos», anunció el Vaticano en un escueto comunicado. Los restos fueron encontrados por obreros el lunes.
Hay una investigación en marcha para establecer la edad y el sexo del cuerpo, así como la fecha de la muerte. Los investigadores se fijarán especialmente en si el ADN coincide con el de Emanuela Orlandi o el de Mirella Gregori.
Orlandi era la hija de un miembro de la policía vaticana y fue vista por última vez el 22 de junio de 1983 al salir de una clase de música.
Fuente:TN