El oro de América ha sido la obsesión de los invasores europeos, desde el mismo viaje de Cristóbal Colon en 1492, el expolio del elemento químico, desde nuestras tierras, continuó durante todo el periodo colonial y también durante las incipientes repúblicas de este lado del continente, debido a las deudas externas contraídas durante las guerras de independencia de nuestros nacientes estados.
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Por Joaquín Pérez
Los nazis hicieron lo mismo con las naciones que invadían, incluidas las familias judías, gitanas y de otras nacionalidades exterminadas durante el holocausto.
Hoy, el oro sigue siendo un botín de guerra, como el robo del oro de Venezuela por parte del Banco de Inglaterra (2022), para el que se prestó la oposición venezolana liderada entonces por el autoproclamado presidente Guaidó.
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En Argentina, ha causado revuelo la medida adoptada por el gobierno de Javier Milei, en un principio oculto y luego debelado por la prensa: el oro de las reservas argentinas estaba siendo enviado de forma oculta a algún lugar desconocido.
Todo surgió por la denuncia del diputado Sergio Palazzo, quien además fue un histórico dirigente de los trabajadores bancarios. Se filtraron vídeos de camiones sacando el oro de las reservas del Banco Central de Argentina. Con el paso de los días se supo que han sido cuatro los envíos de oro al exterior, entre junio y agosto, específicamente a Londres, Inglaterra. Serían más de 500 millones de dólares en lingotes de oro.
El ministro de economía de Milei, Luis Caputo justificó la medida diciendo que es mejor tenerlo afuera porque «así puedes sacar un retorno».
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Ya Menem había vendido todas las reservas de oro de Argentina acumulada durante los gobiernos de Juan Domingo Perón, a precio de liquidación.
Néstor Kirchner volvió a comprar reservas de oro, como respaldo y soberanía de Argentina frente a los vaivenes internacionales, como forma de estabilizar la economía nacional y su moneda.
En contra parte, Milei vuelve a repetir lo hecho por Menem: dilapidar todos los recursos nacionales, endeudar al país y privatizar sus empresas para hacer caja, la que terminará en las manos de los siempre, empobreciendo a la Argentina y sumiéndola en una crisis cada vez mayor.
Inglaterra no solo se ha robado el oro de Venezuela, en 2001 lo hicieron con todo el oro de Islandia, basta recordar que Argentina ha tenido conflicto histórico con Inglaterra por las Malvinas, con un cruento conflicto armado hace solo unas décadas.