por Redacción Werken Rojo.
El acceso a la vivienda para las parejas jóvenes cada vez está más lejos de sus posibilidades.
Los bajos salarios es el principal impedimento, para poder comprar una vivienda.
La especulación de las grandes inmobiliarias es otro factor determinante, las viviendas han aumentado su precio un 67,8% entre 2011 y 2019.
Por primera vez en las últimas tres décadas, los hijos de los trabajadores les espera la perspectiva de vivir peor que sus padres, peor que la generación anterior, que ya era bastante mala.