Pepe Gutierrez Alvarez
«LA CIA EN ESPAÑA» la obra de Alfredo Grimaldos que fue reeditada, revisada y ampliada para la editorial Península, es hasta el momento el trabajo más riguroso que conozco sobre este tema, absolutamente capital en la Transición.
Curiosamente, en la clandestinidad, tildar a alguien de “agente de la CIA” en los ámbitos de la resistencia al franquismo, era algo muy serio pero que se decía con una ligereza que hoy llama a la risa más sardónica. Se hizo muy a menudo desde el “comunismo” o sea desde el PCE-PSUC y por extensión por los diversos grupos maoístas, y por supuesto, los acusados fuimos quienes denunciamos las diversas variantes del estalinismo, criticando personajes como Santiago Carrillo que para la tropa representaba lo que nunca fue. Lo solían hacer muchas veces cuando se quedaban sin argumentos en tal o cual controversia, sobre todo contra las corrientes de raíz anarquista o trotskista, la acusación ya iba de sí. También se empleó con los propios disidentes. Esta fue una de la parte más oscuras de esta tradición, también la más ridícula, la de más fácil sátira.
Nadie negaba que la CIA fuese lo peor. Bastaba recordar la historia del Che o del Vietnam. Todo el mundo sabía que había financiado y orientado la “guerra cultural” contra el “comunismo”. Que en esta guerra se apoyó en la socialdemocracia y en los renegados, tema tratado en profundidad por un marxista abierto clásico, Isaac Deutscher, cuya obra “Herejes y renegados” (editada en Ariel y reeditada on line), distinguía entre los que habían renegado (Malraux, Dos Pasos), y los disidentes que denunciaban los abusos del estalinismo. Para concluir, está claro que esta “guerra cultural” la perdió la izquierda, sobre todo porque el estalinismo fue quemando cartuchos hasta caer en el más absoluto desprestigio…Quien ignore estos hechos está condenado a no entender la derrota definitiva a finales del siglo XX.
Es en este cuadro donde se explica el hecho de la CIA tutelara la Transición, intervino en el golpe de Estado del 23-F, se aseguró de que la respuesta al referéndum sobre la OTAN fuera el más favorable a sus intereses…
La CIA, la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos mantuvo un papel fundamental en innumerables acontecimientos políticos de la historia reciente de España. Mediante la instalación de bases militares y la estricta supervisión del proceso de cambio democrático, ha construido una sólida plataforma de operaciones desde donde condicionar a su favor la política nacional. Desde la Segunda Guerra Mundial y hasta hoy.
En este libro ya clásico, ahora actualizado y ampliado, Alfredo Grimaldos arroja luz sobre las actuaciones de la CIA en España y desvela las conexiones de la agencia con altos cargos del poder político y militar del Estado comenzando por el mismo Jefe de Estado. Dado que para la izquierda de vocación institucional lo único importante era restablecer un marco de mínimos democráticos, la CIOA no tuvo problemas. Actuó como Pedro por su casa.
