Las decenas de miles de estudiantes que hoy hemos protagonizado esta movilización ejemplar hemos dado un rotundo NO a la violencia policial, al artículo 155 que anula la autonomía catalana, y hemos exigido la libertad de Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, presidentes de ANC y Omnium, encarcelados por sus opiniones, por movilizar pacíficamente frente a la represión autoritaria y salvaje del PP. Hemos dicho basta ya a la declaración de guerra contra los derechos de expresión, reunión y manifestación. Hemos dicho basta ya al franquismo de este gobierno y de este Estado.
Como hemos señalado en reiteradas ocasiones, los hederos del franquismo y sus aliados hablan de defender el “Estado de derecho” y la “democracia”. Pero sabemos perfectamente que las leyes no se utilizan para encarcelar corruptos del PP, ni para meter entre rejas a los banqueros que han robado a manos llenas, ni contra los que ejercen violencia contra las mujeres, nos desahucian de nuestras casas, o recortan la educación y sanidad pública. No, las leyes se utilizan para defender los intereses de la oligarquía y de los ricos. Desde el gobierno, Ciudadanos y el PSOE se nos dice que lo que no es legal, no es democrático. Les recordamos que hace no mucho tiempo las mujeres no podían votar, como tampoco lo era votar a los 18 años; no era legal el derecho al divorcio o al aborto, no era legal el derecho a huelga de los estudiantes, o el matrimonio de personas del mismo sexo. ¿Y acaso esa legalidad que aplastaba nuestros derechos era democrática? Por supuesto que no.
El gobierno del PP, Ciudadanos y el PSOE han aplaudido el encarcelamiento de “los Jordis” y laminar derechos fundamentales de la población catalana. Mañana todas estas medidas se pueden aplicar en cualquier otro territorio del Estado, se puede encarcelar a cualquier activista que organice una huelga estudiantil o cualquier tipo de protesta social legítima. ¿Qué tiene esto que ver con el “Estado de derecho” y la defensa de la “democracia”? Absolutamente nada.
La respuesta del pueblo catalán a la violenta represión que hemos vivido ha sido ejemplar. Millones acudimos a votar el 1 de octubre a pesar de vivir un auténtico estado de excepción policial. Cientos de miles participamos de forma valiente en la organización del referéndum, la defensa de los colegios electorales y la protección de las urnas, enfrentándonos a policías armados hasta los dientes, recibiendo golpes y porrazos. Esta firme voluntad se volvió a repetir en la huelga general del 3 de octubre y en las manifestaciones multitudinarias que desbordaron las calles de toda Catalunya.
Desde el gobierno del PP y Ciudadanos, desde el Estado centralista y la Corona, desde la dirección del PSOE-PSC que se ha entregado por completo a la derecha, pretenden que los millones que nos hemos movilizado por nuestros derechos democráticos nos arrodillemos. Buscan amedrentarnos para que no salgamos a la calle, taparnos la boca para que no luchemos contra las injusticias. Saben que la fuerza de la juventud y los trabajadores en la calle, unidos y organizados, es imparable.
Esta alianza reaccionaria ha recurrido a todo su arsenal para tratar de aplastar la voluntad democrática de todo un pueblo: desde las amenazas y la represión más salvaje, pasando por la organización de movilizaciones en defensa de “la España, una, grande y libre”, hasta el desfile de las más de 1500 empresas anunciando el traslado de sus sedes sociales fuera de Catalunya. Los oligarcas, los ricos y los banqueros catalanes, han lanzado un mensaje al pueblo movilizado: estamos al lado de los capitalistas españoles, de su Estado y de su gobierno de derechas, y os advertimos que si continuáis con vuestro empeño os hundiremos en el caos y la miseria. ¡El mismo tipo de chantaje que sufrió el pueblo griego por parte de la Troika, de la UE, tras votar masivamente en un referéndum contra los recortes y la austeridad!
Todos los acontecimientos indican que el gobierno del PP y sus aliados, y el Estado, quieren dar una lección ejemplar al pueblo de Catalunya, a los jóvenes y los trabajadores. ¡No lo conseguirán! Desde el Sindicat d´Estudiants llamamos a la juventud de Catalunya a continuar la lucha para derrotar esta estrategia autoritaria, y mostrar juntos nuestra unidad y voluntad de derrotar la represión y conquistar una república catalana libre de oligarcas y de opresión.
¡Únete al Sindicat d’Estudiants!
¡Fuera el 155!